Manu Ginóbili y Pau Gasol hicieron buenos partidos (mejor el del argentino, pero bien ambos). La diferencia estribó en que mientras los Spurs conseguían una formidable y holgada victoria en Nueva Jersey, los Lakers eran apabullados de forma inmisericorde en Charlotte.
El argentino fue el mejor anotador de San Antonio con 22 puntos. El equipo navega viento en popa. El español fue el mejor hombre de los Lakers (17 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias). El equipo navegaba en un mar calmado que se ha embravecido y la nave angelina empieza a hacer aguas.
Además, Houston se deshizo con comodidad de Denver tras arrasar en los dos cuartos centrales con un parcial de 69-36. Scola anotó 10 puntos y Forbes hizo 7.
New Jersey 85 San Antonio 102
No hubo color en el Prudential Center: 4 cuartos disputados, 4 parciales favorables a San Antonio. Triunfo visitante, claro. La matemática no falla.
Los de Popovich ya llegaron 11 puntos arriba al descanso (48-59) aprovechando la desnutrida defensa local, falta de tensión y de hábitos saludables. Y en la reanudación rompieron el partido sin excesivos problemas para seguir encaramados cómodamente como primer equipo del Oeste y mejor conjunto de la NBA con diferencia. Porque ya suman 46 victorias por sólo 9 derrotas. Ahí es nada.
Los Spurs se permitieron la licencia de no robar un sólo balón en toda la noche y defender a gran nivel (0-13 fue su balance robos-pérdidas). Tanto fue así, que dejaron al rival en un paupérrimo 34,8% en el tiro de campo.
El argentino Manu Ginóbili volvió a ser el alma en el que se enfundó la victoria visitante. El escolta bahiense estuvo realmente brillante. Eléctrico en el primer paso, certero en las penetraciones, cómodo en el tiro exterior, infalible en el tiro libre (8 de 8) terminó el partido con 22 puntos en 30 minutos de juego. Además, capturó 4 rebotes, puso 1 tapón y repartió 3 asistencias.
Suyo fue el pase del partido, una asistencia picada por debajo de las piernas del novato Favors que acabó en manos de DeJuan Blair, pura fantasía. Y suyo fue el impulso que supuso la clave a la hora de romper definitivamente el partido, porque fueron suyas las canastas de la ruptura.
Tras Ginóbili, el elegante Tim Duncan con 15 puntos, 11 rebotes y 3 tapones, DeJuan Blair con un doble doble también y 3 jugadores más con dobles dígitos anotadores: un completo Tony Parker, George Hill y Gary Neal.
Los Nets no pudieron nunca con la defensa rival. Erraron infinidad de tiros y nunca estuvieron cómodos en ataque. Avery Johnson puso a sus 12 pupilos en cancha y todos ellos anotaron, pero nadie supo romper la defensa contraria. De hecho, Brook Lopez y Travis Outlaw fueron los máximos encestadores locales con 11 puntos, pero el primero hizo un 5 de 16 en el tiro y su equipo sumó un -25 en el marcador con él en cancha y el segundo acabó con 4 de 13 en el lanzamiento.
Zozobra general de los Nets (a la que no fue ajeno el novato Favors: 4 faltas en 8 minutos). Sólo se libró un poco Jordan Farmar.
Charlotte 109 L.A.Lakers 89
La irregularidad de los Lakers empieza a preocupar a sus aficionados. Los dobles campeones llevaban una gira por el Este maravillosa con 4 victorias en 4 partidos, incluido el triunfo estelar ante Boston en el Garden, pero de repente, en 24 horas, se han venido abajo. El domingo anotaron 75 puntos y el lunes hacen 89 para perder ante Orlando y Charlotte por 14 y 20 puntos de diferencia. Un desastre.
El desastre fue de tal magnitud, que el equipo de Phil Jackson llegó a ir perdiendo en la segunda parte por 28 puntos. Una vergüenza.
En el desatino participaron todos, aunque unos más que otros. De gran calibre fue la debacle defensiva en la segunda parte. Y aquí, en el terreno defensivo, no se salvó ni un solo jugador angelino.
El partido había llegado al ecuador con un engañoso 49-43, ya que los Bobcats habían merecido más en esos 2 primeros cuartos en los que los Lakers, sin jugar bien, habían salvado los muebles. Pero ya se adivinaba una tendencia en el choque que se corroboraría por completo en la continuación. Los Bobcats mordían y los Lakers vivían en la indolencia.
La segunda parte fue brutal. Charlotte endosó 60 puntos al equipo californiano y se fue al final del tercer cuarto 18 arriba (78-60) tras una canasta sobre la bocina de Gerald Wallace. A partir de ahí, empezó la pesadilla visitante. Humillante el final del partido para los Lakers. El último cuarto fue un verdadero destrozo para el ego de los campeones, que terminaron perdiendo por 20 y anotando 3 de 19 triples.
Porque gran parte de la culpa radicó en la excelente defensa de perímetro de los locales y el escaso acierto de los visitantes desde la lejanía. En realidad, sólo se salvó en ataque Pau Gasol y, por momentos, Kobe Bryant, que jugó tocado. Gasol concluyó con 17 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias, 2 robos y 6 de 9 en el tiro de campo. Muy buenos números en sus 36 minutos de juego. Bryant sumó 20 tantos. El resto, salvo la lucha alocada de Artest, nada de nada.
Bynum empezó genial pero se desvaneció según avanzaba el partido, Odom no funcionó y la segunda unidad en general fue una pantomima.
Los Bobcats hicieron un partidazo, pleno de físico pero también de acierto. Los Gerald triunfaron: Wallace acabó con 20 puntos y 11 rebotes y Henderson con 18 tantos. Además, Boris Diaw, que arrancó como un tiro, logró 16 puntos en 23 minutos y Nazr Mohammed acabó con idéntica cantidad de puntos en 1 minuto más de juego. Ambos fueron importantes. Y es que Charlotte ni siquiera necesitó de la mejor versión de D.J.Augustin y Stephen Jackson para apalear a unos Lakers que empiezan a estar tocados, pues han perdido el doble de partidos que los Spurs (9 y 18).
Houston 121 Denver 102
Inicio espectacular de los Nuggets, que terminaron el primer tiempo con ambiente festivo tras dominar por 19-32.
Pero poco les duró la alegría, porque espoleados por ese mal inicio, los Rockets endosaron a Denver un parcial de 39-22 en el segundo cuarto y acto seguido otro de 30 a 14 en el tercero, para un resultado de 69-36 en 24 minutos. Brutal.
En esos 24 minutos centrales, Houston sentenció el partido, un partido en el que los de Adelman encestaron 14 triples con una efectividad en el tiro desde más allá del arco de un 44%. Ese dato, unido al excelente acierto en los tiros libres y a la maravillosa relación asistencias-pérdidas (31-10) pesaron como una losa en el desenlace del juego.
Hasta 7 jugadores locales anotaron 10 o más puntos. Courtney Lee fue el mejor con 22 tantos en 26 minutos, 26 minutos en los que su equipo hizo un +21 en el luminoso y en los que el jugador anotó 5 triples de 7 intentos. También brilló Aaron Brooks, que logró 18 puntos en 21 minutos, los que pudo estar en pista antes de ser eliminado por 6 faltas. Y es que los suplentes fueron decisivos, pues llegaron a anotar la friolera de 68 puntos.
Entre los titulares, la perfección de Battier fue lo mejor: 17 puntos con 7 de 7 en el tiro de campo, incuidos 3 de 3 triples. El argentino Luis Scola, mientras, estuvo a un nivel discreto para lo que nos tiene acostumbrados. Aportó 10 tantos, 8 rebotes y 3 asistencias en 30 minutos y tuvo un pobre 3 de 10 en el tiro doble.
Denver se desinfló a partir del segundo cuarto. Afflalo fue su mejor pieza con 17 puntos y Anthony sumó 16 en un partido gris. Mientras, el panameño Gary Forbes gozó de minutos, dado el discurrir del partido. Sus números fueron 7 puntos y 1 pase de canasta en 19 minutos.