La nieve ha bloqueado buena parte del norte de Georgia y ha impedido que esta noche se pueda celebrar en el Philips Arena el partido que debía haber enfrentado a Atlanta Hawks y Milwaukee Bucks, dos equipos con jugadores hispanos en sus filas.
La fuerte tormenta invernal que azota la zona de Atlanta ha poblado las calles y carreteras de nieve y hielo, dificultando cuando no imposibilitando los desplazamientos tanto de jugadores, como de trabajadores y aficionados.
El portavoz de los Hawks, Arthur Triche, ni siquiera veía claro que los empleados del Philips Arena pudieran llegar a sus puestos de trabajo de modo que el pabellón pudiera abrirse.
Los Bucks estaban ya en la ciudad, llegaron el lunes, pero ahora el problema que se les presenta, al igual que al equipo anfitrión, es si podrán salir. Los Hawks deberían jugar mañana en Toronto, y los Bucks recibir en Milwaukee a San Antonio, pero no está nada claro que puedan desplazarse a tiempo para hacerlo.