El base novato de los Memphis Grizzlies Greivis Vásquez está ya en la última fase de recuperación de la lesión de tobillo que le ha impedido jugar hasta ahora en la pretemporada. El venezolano ha recibido el visto bueno de los médicos para volver a entrenar, pero no a tope.
Vásquez se tendrá que conformar por ahora con las carreras, los tiros y los ejercicios físicos en el gimnasio para fortalecer su tobillo antes de poder entrenar con el resto de sus compañeros y participar en un 5 contra 5, ya que los galenos aún no le permiten ejercitarse en todo aquello que suponga contacto con otros jugadores.
En todo caso, es una gran noticia para el caraqueño de cara a estar listo para cumplir por fin su gran sueño de participar en un partido oficial de la NBA, tras ver truncada su preparación por una lesión en el tobillo derecho que le obligó a pasar por el quirófano a finales de julio.
El propio jugador se ha mostrado optimista y esperanzado de poder estar presente en el primer partido de temporada. “Hoy corrí y el tobillo reaccionó muy bien.. Creo que para el último juego de pre temporada estoy listo.. Vamos a ver qué pasa.”, escribía ayer mismo Vásquez en su Twitter.
Tercer venezolano en la NBA
Empieza así a despejarse el futuro del jugador de los Grizzlies tras un verano agitado, tanto por su lesión como por los problemas con la firma de su contrato, resueltos finalmente de forma positiva a mediados de septiembre.
De su debut en la NBA está pendiente toda la afición hispana y en particular, sus seguidores venezolanos, deseosos de ver a un compatriota en la mejor liga del mundo, algo que no ocurre desde diciembre de 2002, cuando Oscar Torres fue cortado por los Rockets.
Torres fue el segundo venezolano en la liga tras el recordado pionero Carl Herrera, que disputó 8 temporadas a buen nivel, la mayor parte con Houston y San Antonio, y puede presumir de poseer 2 anillos de campeón, conseguidos con los Rockets en 1994 y 1995 y a los que contribuyó de forma significativa.