El caribeño Adonal Foyle ha decidido poner fin a su carrera profesional como jugador de baloncesto y lo ha hecho de una forma bastante original, escribiendo un poema de despedida. Los problemas continuos en su rodilla derecha le han llevado a tomar la decisión.
El pívot de los Magic apenas ha podido jugar en sus 2 últimas temporadas por culpa de las lesiones. En la 2008-09, apenas jugó 10 partidos a caballo entre Memphis, donde sólo pisó una vez la pista, y Orlando y la campaña pasada terminó en blanco para él tras ser operado de la rodilla en plena pretemporada y no poder recuperarse.
“Básicamente, no he podido volver a un estado en el que sintiera que podía aportar algo. Mi idea siempre ha sido que el baloncesto ha sido demasiado bueno para mí como para seguir en él si no puedo darle nada”, ha afirmado Foyle que quiere dar por finalizada una parte de su vida, para afrontar otra nueva. A causa de su retirada, también dimitirá probablemente como primer vicepresidente de la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto (NBPA).
El pívot nacido en la minúscula isla caribeña de Canouan (apenas 10 kilómetros cuadrados), perteneciente a San Vicente y Granadinas, se formó en la Universidad de Colgate y fue elegido en el puesto número 8 del draft de 1997 por los Golden State Warriors.
Con los Warriors desarrolló la mayor parte de su carrera, 10 temporadas, antes de pasar por Orlando, fugazmente por Memphis, y posteriormente regresar a la franquicia de Florida. En 733 partidos en la liga, promedió 4,1 puntos, 4,7 rebotes y 1,6 tapones en 17,8 minutos de juego. Su tremenda fortaleza física y sus escasas dotes para encarar la canasta contraria le encaminaron desde sus inicios al papel de especialista defensivo.
Foyle ha sido también conocido a lo largo de su carrera por su activismo político y su trabajo continuo en todo tipo de labores humanitarias, a las que piensa seguir dedicando buena parte de su tiempo.
Además, el antillano también gusta de escribir poesía y por ello ha decidido decir adiós al baloncesto de una forma original, con un poema de despedida y agradecimiento por toda su carrera titulado “Love Song to a Game” (Canción de amor a un juego) que hoy publica el diario Orlando Sentinel.