Los Washington Wizards han decidido mantener en su plantilla a Shaun Livingston hasta final de temporada. Tras 2 contratos de 10 días, la franquicia solo tenía 2 opciones, renovarle por lo que queda de campaña o echarle, y ha optado por la primera.
Una buena noticia para Livingston en su intento de conseguir estabilidad en la liga en la que una vez fue un prometedor jugador. Luego llegó su terrible lesión de rodilla y desde entonces, un auténtico calvario para intentar desmentir a todos aquellos que dieron su carrera por terminada tras ver la impresionante imagen de su rodilla destrozada.
El año pasado, Livingston ya intentó regresar a la competición, pero apenas consiguió jugar 4 partidos con Miami y, tras pasar por la NBADL, 8 más, con algo más de presencia en pista, con los Thunder.
En la actual, ya lleva 20: 10 a principio de temporada con los Thunder, con escaso rendimiento, y otros 10 con Washington, donde ha promediado 4,9 puntos y 3,3 asistencias en 15,5 minutos de juego y ha protagonizado buenas actuaciones.
A sus 24 años, Livingston es todavía muy joven y está dispuesto a seguir luchando por demostrar que tiene sitio en la NBA, pero, sin duda, le va a costar conseguirlo. Lo logre o no, el simple hecho de haber sido capaz de volver a una cancha de baloncesto tras una lesión como la suya, y más a la liga más exigente a nivel físico del mundo, es para quitarse el sombrero.