A estas alturas de temporada pocos habrían apostado por tener a los Grizzlies rozando el 50% de victorias y todos los analistas de la NBA coinciden en asignar a la pareja interior del equipo, Zach Randolph y Marc Gasol, la mayor parte del mérito en la mejora del equipo.
Los números cantan. Zach Randolph, cuyo rendimiento en los último encuentros ha sido extraordinario, está promediando 19,6 puntos y 11 rebotes por partido, Marc Gasol, 14,8 y 9,9 con más de un 60% de efectividad en el tiro. Entre los dos, más de 34 puntos y casi 21 rebotes por encuentro.
La pareja interior de los Grizzlies es la segunda mejor de la liga en el capítulo reboteador, sólo superada por Love y Jefferson de los Timberwolves, y el equipo de Memphis ha pasado de ser el de peor promedio reboteador de la liga, el año pasado, a situarse en la cuarta posición esta temporada y lo que es más importante, a ser el equipo que más domina bajo los tableros, capturando 5 rebotes más que sus rivales por encuentro.
La presencia además de 2 hombres que pueden anotar tanto alejados del aro como próximos a él obliga a prestar una atención extra a las defensas contrarias de la que están sacando provecho hombres exteriores como Gay o Mayo.
“Cuando tienes jugadores que pueden anotar en el poste, siempre mejora tu juego, especialmente cuando tienes gente que puede anotar desde fuera”, asegura el técnico de los Grizzlies, Lionel Hollins, que no puede disimular su alegría por cómo está discurriendo la temporada.
Cada vez más compenetrados
Lo cierto es que la química del equipo, caso Iverson aparte, ha mejorado y así lo reconocen los propios jugadores. El primero en hacerlo es Marc Gasol que asegura que “Estamos confiando los unos en los otros. Todo el mundo habla, da indicaciones, se ayuda y los resultados están a la vista”.
Unas palabras muy diferentes a las que dedicaba al juego de su equipo el catalán la temporada pasada por estas fechas, cuando afirmaba que los de Memphis “corrían como pollos sin cabeza”.
Hollins no consiguió integrar a Iverson en el equipo, pero si parece estar haciéndolo con Randolph, algo que no parecía sencillo dados los antecedentes del jugador. El polémico ala-pívot se muestra encantado en Memphis y no tiene más que buenas palabras para su compañero en las tareas interiores.
“Tiene mucha calidad. Puede lanzar, anotar en la zona y es un buen pasador. Nos complementamos el uno al otro muy bien”, dice Randolph de Gasol. Esa aparente buena compenetración de ambos está sin duda impulsando el rendimiento de todo el equipo.
Los elogios llegan incluso de sus rivales. “Tienen un gran juego interior y mueven muy bien el balón... Su cinco titular es una eficiente unidad ofensiva. Probablemente una de las 5 o 10 mejores de la liga”, dice de ellos el veterano entrenador de los Nuggets George Karl.
Ahora solo falta que los de Lionel Hollins sean capaces de mantener e incluso mejorar el nivel mostrado hasta el momento. Aunque para poder hacerlo hasta final de temporada será necesario que aumente la aportación del banquillo, hasta el momento, el punto más débil del equipo.