El Oeste arrasa al Este (146-119) en una gran noche de Pau Gasol

El Oeste arrolló al Este sin pudor alguno en una noche hermosa para el español Pau Gasol, que en su segundo All-Star terminó con 14 puntos y 8 rebotes. Y el MVP fue para... Kobeshaq. Bryant y su ex compañero O'Neal compartieron galardón de forma justa, aunque bien podría también haber entrado en la disputa Chris Paul.

Kobe Bryant hizo 27 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias y 4 robos, mientras que Shaquille O'Neal concluyó con 17 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias. Visto así, parecería clara el nombramiento del primero como MVP, pero es que el truco está en una cifra: Shaq logró esos números en ¡11 minutos!. En un hecho insólito, un jugador ganó anoche tran preciado galardón disputando un tiempo residual en cantidad que no en calidad, ya que los minutos de O'Neal coincidieron con el momento álgido del Oeste, minutos en los que dieron un auténtico baño al Este.

En esa lucha, podría haber entrado también perfectamente el gran Chris Paul, que se fue del partido con 14 puntos, 14 asistencias y 7 rebotes. Lo suyo fue una auténtica exhibición en el pase, un generoso esfuerzo por el espectáculo alejado del ego. Algún día tendrán que premiarse este tipo de bondades baloncestísticas, algún día, pero no hoy.

Hoy no podía ser porque pocas veces a la NBA se le había presentado una ocasión más propicia para lograr la cuadratura del círculo. Y es que la decisión de la liga, además de ser justa resultó providencial a la hora de vender los valores que Stern quiere vender al mundo. Nada mejor que una bella reconciliación entre dos megaestrellas de la liga, nada más valioso que un abrazo entre Kobe y Shaq compartiendo un trofeo, algo que no hacían desde su tercer anillo conjunto, el que dio paso a su disolución como pareja.

Stern estaba feliz, Bryant y O'Neal también, Phil Jackson sonreía, el público disfrutaba y colorín colorado...

Otro hombre feliz, Pau Gasol

Otro jugador al que se le notaba la satisfacción en el rostro era Pau Gasol. Su segundo All-Star nada tuvo que ver con el primero. Ya en los Lakers, alcanzado otro estatus social en la liga y adquiriendo el máximo respeto de todos en la presente temporada, Gasol jugó de otro modo que en su primer Partido de las Estrellas y sus compañeros le miraron de otro modo.

Estuvo suelto el jugador de Sant Boi. Saltó por primera vez a la cancha cuando restaban 41 segundos para finalizar el primer cuarto y apenas 10 segundos después, en su primera jugada, logró lo que no pudo lograr en su primera participación, allá por el 2006, anotar una canasta. Un fantástico pase de Nowitzki le permitió colgarse espectacularmente del aro e inaugurar su marcador antes de romper a sudar.

Su segundo cuarto fue espléndido y se fue al descanso con 10 puntos y 4 rebotes en su haber, una actuación que llevó más allá en el cuarto período para terminar con 14 puntos, 8 rebotes, 1 asistencia, 1 tapón y 1 robo de balón sin pérdida alguna en 17 minutos de juego. Anotó 5 de sus 7 lanzamientos dobles y todos los tiros libres de los que dispuso, que fueron 4.

Sin duda, una jornada feliz para el español, que completó así un gran Fin de Semana de las Estrellas para el baloncesto de su país. Un fin de semana que comenzó con el excelente papel jugado por su hermano Marc y por Rudy Fernández en el partido entre rookies y sophomores y que prosiguió con el dignísimo papel de Fernández en el Concurso de Mates, en el que no contó con el favor del jurado.

Dominio incontestable del Oeste

El encuentro empezó con un parcial de 6-16 para el Este, un inicio que pronto se reveló como un auténtico espejismo, ya que el Oeste remontó con facilidad hasta situarse 27-20 completando un parcial fantástico de 21-4.

Ya en esos primeros minutos se vio que Chris Paul estaba por la labor de hacer jugar a sus compañeros y que Kobe Bryant tenía entre ceja y ceja, aunque lo disimulara por momentos, el ganar y hacerse con el MVP.

La parte final del cuarto la jugó el Oeste con 3 europeos en sus filas -Gasol, Nowitzki y Parker-, mientras Kobe y Shaq, que se sentaron juntos en el banquillo, hablaban amigablemente perfilando ya lo que más tarde sería el MVP del partido, un tal 'Kobeshaq'.

Concluyó el primer cuarto 34-27, un resultado que marcó la tendencia del partido, ya que los jugadores occidentales defendieron a un nivel más que aceptable durante el encuentro dejando en 3 cuartos al rival por debajo de los 30 puntos. Lejos de ese mínimo nivel defensivo, el equipo oriental dirigido por Mike Brown naufragó en defensa hasta extremos inimaginables. Su falta de espíritu, su absoluta indolencia, hizo que su rival anotara 34, 38, 38 y 36 puntos en cada uno de los cuartos, que lograra un 61,3% en el tiro de campo y que alcanzara la brutal cifra de ¡96 puntos anotados en la pintura!. Esa falta de tensión en la retaguardia mató el partido, a pesar de que éste llegara al descanso con un igualado 72-67. Gran culpa de que así fuera la tuvo Paul Pierce, que hizo un segundo cuarto espectacular.

El encuentro se rompe

La ruptura del encuentro se produjo en el tercer cuarto, donde el Oeste ganó al Este 38-24 y fue entonces donde surgieron el mejor Kobe y el mejor Shaq. Bryant lideró el impulso inicial del Oeste, que con un parcial de 18-7 se escapó en el marcador 90-74.

La ventaja se estabilizó en torno a los 10 puntos. Fue entonces cuando O'Neal, en unos minutos bárbaros, aniquiló al Este. Lo hizo con 3 volcadas consecutivas, la primera de las cuales tras dar un pase a Paul por debajo de las piernas de Howard para que el base le devolviera el pase y O'Neal se colgara del aro. Una pared bellísima.

Con O'Neal en racha, Parker hizo que los locales alcanzaran los 20 puntos de diferencia, que antes del descanso llegó a ser de 21.

Y ya el último cuarto fue puro humo, ya que el partido estaba decidido y se fue desinflando poco a poco hasta terminar de un modo un poco triste.

El Oeste no flaqueó en ningún momento, firmó el primer alley-oop del partido a 9:35 del final con un pase de Parker a Roy y dejó que James se resarciera dando algo de espectáculo y que Howard se dedicara a tirar de lejos, incluido un triple errado.

Por lo demás, el partido se convirtió en un paseo militar para los de Phil Jackson, entre los que además de los ya citados Bryant, O'Neal, Paul y Gasol, destacaron Amare stoudemire (19 puntos y 6 rebotes), Brandon Roy (que fue el que más jugó y terminó con 14 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias) y Tony Parker, que hizo 14, 4 y 4.

Mientras, en el lado perdedor, los mejores fueron LeBron James (20 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias), Dwyane Wade (18 puntos, 5 asistencias y 3 robos) y Paul Pierce (18 puntos en 20 minutos), destacando también Howard -13 puntos y 9 rebotes-, Mo Williams y Kevin Garnett.

Un partido salpicado de homenajes

El encuentro estuvo salpicado de homenajes, el primero de los cuales fue el que se tributó a Bill Russell en un tiempo muerto del primer cuarto. En pleno tiempo muerto, se sacó una tarta a la pista y rodeado de los 3 All-Star de Boston -Garnett, Pierce y Allen- celebró su 75 cumpleaños.

El segundo vino en el descanso cuando se hizo un homenaje a los olímpicos, homenaje en el que participaron 13 jugadores: 6 hombres y 2 mujeres de los equipos olímpicos de Estados Unidos y 5 jugadores internacionales -Pau y Marc Gasol, Luis Scola, Yao Ming y Dirk Nowitzki-.

También se rindió tributo al inicio del cuarto período a dos grandes de la NBA, 'Magic' Johnson y Julius Erving, y en pleno último cuarto se hizo además un simbólico traspaso de poderes entre Phoenix y Dallas, ciudad que será la sede del All-Star 2010, un traspaso de poderes en el que participaron el jugador de los Suns Shaquille O'Neal y el de los Mavericks Dirk Nowitzki.