Tras 7 partidos seguidos sin poder jugar, todo parece indicar que los aficionados de los Jazz tendrá aún que esperar al menos 1 semana más para poder disfrutar de nuevo del juego de Carlos Boozer.
Así lo afirma el propio jugador en declaraciones al diario Deseret News. “Se está curando pero no tan rápido como querría”, afirma Boozer acerca de su lesión, “probablemente me quede una semana”. El jugador sufrió un fuerte golpe en su rodilla izquierda jugando contra Milwaukee el pasado 19 de noviembre.
Como consecuencia del golpe sufrió una contusión en la rótula y un pequeño desgarro en el tendón del cuádriceps de su pierna izquierda. Una lesión molesta pero mucho menos grave de lo que todos temieron en un principio.
El propio Boozer reconoce que al principio temió que la cosa fuera mucho peor y se vio pasando por el quirófano. Pero afortunadamente para él y su equipo, sus temores no se confirmaron.
Aunque ha empezado ya a ejercitarse, la lesión no está del todo recuperada. “Todavía tengo un poco de dolor, pero está mejorando, lo que es un buen síntoma”, afirma y asegura que la zona lesionada aún tiene que fortalecerse para que pueda correr a plena velocidad y realizar sin problemas todos los movimientos propios del juego.
Nadie en los Jazz se quiere arriesgar a un regreso precipitado que provoque una recaída, de ahí que prácticamente esté descartada su vuelta esta semana, un periodo en el que los Jazz tienen un apretado calendario con 4 partidos en 5 noches.