Charlie Villanueva se muestra ilusionado ante la temporada que comienza y el desafío que supone. Y es que los Bucks parecen haber dado una segunda oportunidad al alero dominicano que reconoce, en unas declaraciones que publica el Milwaukee Journal Sentinel, que estaba prácticamente convencido de que iba a ser traspasado este verano.
Pero el traspasado finalmente fue el chino Yi Jianlian, su rival por el puesto de ala-pívot dentro de la franquicia. Villanueva se enteró de la noticia tras recibir el mensaje de un amigo y reconoce que no se lo podía creer. “Fue como ‘no puede ser’”, recuerda Villanueva, “estaba convencido de que iba a ser yo el traspasado. Con todo el despliegue publicitario que había a su alrededor [de Yi]... me pilló desprevenido”.
“Es gracioso cómo funcionan las cosas”, remata, “cuando la temporada terminó tenía mis dudas. No creía que fuera a volver”.
Con la marcha del jugador chino, Villanueva ha quedado como única referencia del equipo en el puesto de 4 y ante él se presenta la oportunidad de disfrutar de una indiscutible titularidad y de bastantes minutos de juego.
Objetivo: el doble-doble
En su primera temporada en Milwaukee, Villanueva sólo pudo jugar 39 partidos debido a las lesiones. En la segunda, la pasada, la presencia de Yi le llevó a salir la mayor parte de la temporada desde el banquillo y a disfrutar de un reparto de minutos muy irregular lo que, según dice, “fue muy duro. Fue muy frustrante a veces que mis minutos fueran tan inconsistentes. Pero eso pertenece al pasado y ya terminó. Fue una experiencia de la que aprender.”
Ante el comienzo de su tercer año en el equipo, el dominicano se plantea trabajar duro y busca un logro ambicioso. “Mi objetivo es ser un hombre de doble-doble. Eso es lo que quiero ser en esta liga”. El año pasado anotó 11,7 puntos (cuarto del equipo) y capturó 6,1 rebotes. Esta temporada quiere mejorar esos números.
“Creo que lo más importante para mí, especialmente teniendo un entrenador como Skiles, es la condición física, y estar tan en forma como pueda”, afirma. Y para ello ya lleva varias semanas preparándose en el Cousins Center, la instalación de entrenamiento de los Bucks.
Allí ha estado entrenando con algunos de sus nuevos compañeros y se muestra especialmente impresionado con el nuevo base del equipo Luke Ridnour de quien no duda en decir que “me gusta mucho, con él sabes que si te mueves en la pista te va a pasar el balón”.
Sobre su nuevo entrenador, Scott Skiles, Villanueva afirma que es un entrenador duro cuya presencia ya se deja notar en el equipo y que quiere lo mejor para sus jugadores. “Me gusta que me desafíen y sé que él va a hacerlo”, sentencia.