El ala-pívot argentino de Houston Rockets, Luis Scola, prefiere no plantearse grandes objetivos en su segundo año como profesional en Estados Unidos. El internacional albiceleste afirma en una entrevista concedida a SportsYA que su idea es seguir mejorando.
Scola se plantea su segunda temporada en la NBA como una etapa de crecimiento, un crecimiento paulatino construído a partir de pasos firmes.
El que ha sido esta campaña un novato muy especial, tiene 28 años, asegura al periodista Francisco Barragán cuando éste le pregunta por sus expectativas de cara a la próxima campaña: “Intentar seguir mejorando, continuar con la misma línea que tuve este año. La idea es poder ayudar al equipo de la mejor manera posible”.
El jugador bonaerense recuerda con satisfacción su rendimiento como novato en la mejor liga del mundo, pero, sobre todo, le satisface la buena trayectoria que tuvo su equipo a pesar de las lesiones, especialmente tras la baja del pívot chino Yao Ming, que exigió a Scola un rendimiento extra en la parte final de la temporada regular.
Por eso guarda un grato recuerdo de la racha de 22 victorias consecutivas logradas por los Rockets, si bien prefiere darle su justa importancia. “Por suerte nos tocó un buen calendario y empezamos a jugar bien, pese a no tener a Yao Ming. A veces pasa, fueron muchos partidos, pero son cosas que pasan”.
El baloncestista de Houston asegura en la entrevista que su favorito para la final de la NBA es Boston (la entrevista está hecha antes de la tercera victoria de los Celtics). Y es que el ex jugador del Tau de Vitoria considera que Boston “es un gran equipo y lo va a demostrar”.
Argentina en los JJOO
Finalmente, el ala-pívot argentino se refiere a los Juegos Olímpicos de Pekín, una cuestión en la que prefiere no meter presión ni a él ni a la selección argentina, ya que reconoce la dificultad que entraña repetir el oro de Atenas. “Trataremos de hacer lo mejor para volver a traer la medalla para todos los argentinos”, concluye.
Scola ha rendido a una gran altura en su temporada de debut en la NBA. Disputó todos los encuentros de la temporada regular –82- con promedios de 10,3 puntos y 6,4 rebotes, números que incrementó en los 6 encuentros de post-temporada que jugó, en los que logró una media de 14 puntos y 9,3 rebotes por partido.
Su buena labor le llevó a convertirse en el tercer mejor novato de la liga tras Kevin Durant y Al Horford, formando parte del equipo de novatos del All Star e integrando el mejor quinteto de rookies de la temporada.