La primera ronda de playoffs en el Este se jugará, fundamentalmente, el domingo, jornada en la que se disputarán tres de los cuatro partidos.
Los enfrentamientos iniciales, al contrario que en el Oeste, están lejos de deparar duelos espectaculares, al menos a priori, y en ellos intervendrán 5 jugadores hispanos -Horford, Calderón, Delfino, Arroyo y Herrmann, si bien la participación de estos dos últimos, especialmente del argentino, se presenta difícil.
La eliminatoria más igualada, en principio, es la que enfrenta al actual subcampeón de la NBA, Cleveland Cavaliers, y a Washington Wizards, que llega a los playoffs con sus tres estrellas -Arenas, Jamison y Butler- a disposición de su entrenador, lo que es toda una novedad.
Boston Celtics-Atlanta Hawks
Los de Massachusets se presentan como claros favoritos en este enfrentamiento. Han sido primeros en el Este con un número de triunfos espectacular -66- y han dominado de principio a fin sin apenas oposición.
Todos los pronósticos hablan de un 4-0 ó 4-1 a favor del equipo de Doc Rivers, más aún cuando en sus enfrentamientos directos en la fase regular los Celtics han dominado 3-0 y en sus duelos históricos en playoffs el resultado es de 8-1 en las 9 series que han disputado, si bien la última data de hace 20 años.
Pero aunque nadie duda del favoritismo indiscutible de Boston, éstos habrán de tener cuidado con la respuesta de los Hawks, un conjunto que apenas ha ganado 37 encuentros en la temporada. Y es que el mismo motivo por el que Boston es aún más favorito es el origen también de que tenga que adoptar ciertas precauciones. Ese motivo que lleva a una doble consecuencia aparentemente contradictoria no es otro que la juventud de Atlanta. Los Hawks son un equipo joven en pleno crecimiento, lo que los hace bisoños a la hora de jugar los playoffs por su escasa experiencia, pero también, hasta cierto punto imprevisibles.
En Atlanta la experiencia la pondrán Bibby y Joe Johnson y la fuerza imprevisible de la juventud los Horford, Josh Smith, Joe Childress, Marvin Williams... Por cierto, el dominicano Al Horford no ha podido empezar mejor su periplo NBA. Gran temporada de debú a nivel personal y colectivo, ya que los Hawks no llegaban a la post-temporada desde 1999.
Por lo que respecta a los Celtics hay poco que decir que no se haya dicho ya, aunque habría que destacar, amén de su calidad en ataque, su tremenda labor defensiva a lo largo de la temporada, un trabajo que ha dejado a sus rivales en un pobre 41,9% en el tiro de campo.
Los célticos han configurado un equipo para soñar a partir de un 'Big Three' de ensueño: Pierce (19,6 puntos de promedio en la fase regular), Garnett (18,8) y Allen (17,4). Pero a este equipo hay que sumarle otras unidades: la gran evolución del joven Rajon Rondo, el factor sorpresa que puede representar el veteranísimo Cassell, un estilista prodigioso, o la aportación que puedan hacer desde el banco jugadores como Posey o House, que es, por cierto, el único componente de las dos plantillas cuya participación es dudosa por problemas físicos.
Orlando Magic-Toronto Raptors
Es éste el duelo de primera ronda que involucra a más jugadores hispanos, a Arroyo por parte de Orlando y a Calderón y Delfino por parte de Toronto, unos jugadores hispanos que, salvo Delfino, son el origen de diversos interrogantes que se empezarán a desvelar el domingo.
La primera y más llamativa duda es la que envuelve al armador español José Manuel Calderón en su pugna por la titularidad con el texano T.J.Ford. Mitchell tendrá que decidir si el regreso de Ford a la titularidad en los últimos partidos de la temporada regular se prolonga a los playoffs. Por lo dicho en su día, no debería de ser así, y Calderón debería regresar al quinteto inicial, pero de Mitchell se puede esperar cualquier cosa.
La otra incógnita la representa Arroyo, que está, obviamente, en la lista de 15 jugadores que disputarán las eliminatorias por el título, pero no se sabe qué puesto ocupará en la rotación de Stan Van Gundy, aunque todo parece indicar que seguirá siendo el tercero de la lista de bases tras Nelson y Dooling.
Toronto se siente cómodo, hasta cierto punto, al encontrarse con Orlando, aunque sea un equipo más poderoso que el canadiense, toda vez que conocida era su preferencia por evitar en primera ronda a Cleveland Cavaliers. Pero habrá que ver si estos Magic consolidados son mejores clientes en los playoffs que el equipo liderado por Lebron James.
Lo cierto es que a nivel mediático el duelo tiene dos nombres propios: Dwight Howard (Orlando) vs Chris Bosh (Toronto). Pero no hay que olvidar que los de Florida disponen de su propio 'Mini Big Three' configurado por Howard, Turkoglu y Lewis, algo con lo que no cuenta el conjunto canadiense, que, eso sí, tiene una gran profundidad de banquillo y un juego colectivo nada desdeñable.
Orlando llega a esta primera ronda con un balance en la temporada de 52-30 por el 41-41 de Toronto. La clave será saber si se va a ver al mejor Toronto, en cuyo caso podría plantar cara a los Magic y llevar la serie a, al menos, 6 partidos, o si se va a ver a los Raptors de la parte final de la temporada regular. De ser así, Orlando no tendría rival.
Los dos equipos llegan al completo, salvo la consabida baja de Garbajosa en Toronto, y lo hacen con un parcial de 2-1 para Orlando en los enfrentamientos mutuos que han protagonizado en la presente campaña.
Ambos conjuntos, por cierto, vienen de caer eliminados en primera ronda en 2007, por lo que uno de ellos, el que gane, superará sus prestaciones de la temporada pasada.
Detroit Pistons-Philadelphia 76ers
Parece éste un duelo, a simple vista, muy claro, aunque bastantes analistas consideran que el equipo de Mo Cheeks puede plantar cara al de Flip Saunders.
Pase lo que pase, hay que alabar de antemano el enorme rendimiento que ha sacado Cheeks a un equipo cuya plantilla no estaba exenta de importantes limitaciones. Philadelphia ha ganado 40 partidos, y ha demostrado un comportamiento ejemplar como equipo, partiendo del triángulo integrado por los dos Andre, el base Miller y el alero Iguodala, y el pívot Samuel Dalembert.
La base para que esos expertos hablen de una cierta oposición por parte de Philadelphia reposa, en parte, en los encuentros que han disputado en fase regular ambas escuadras. Cuatro choques que se han saldado con dos victorias por cabeza.
A pesar de ello, a nadie le extrañaría un 4-1 o incluso un 4-0 a favor de los Pistons. Porque este equipo cuando juega playoffs se pone muy, pero que muy serio y en el Palace of Auburn Hills es una auténtica garantía.
La clave de esa consistencia de Detroit no es otra que su continuidad como equipo, con una base de jugadores que el aficionado ya se sabe de memoria: Billups, Hamilton, Prince, Wallace... Ése es su gran patrimonio. Y por mucha calidad que atesore su banquillo, mucho nos tememos que Saunders, a la hora de la verdad, peque de conservador y vuelva a sobrecargar de minutos a su quinteto titular. Nadie podrá reprochárselo.
En ese panorama aquí anticipado no entra el argentino Walter Herrmann, que difícilmente se vestirá de corto. Aunque la esperanza es lo último que se pierde.
Cleveland Cavaliers-Washington Wizards
Es éste el duelo más igualado teóricamente y la única serie en la que no habrá jugadores hispanos en la lista de inscritos.
En principio, Cleveland debería de partir como favorito, ya que es el actual subcampeón, pero este año el equipo de Mike Brown ha generado ciertas dudas, a pesar de la impresionante temporada protagonizada por su estrella, Lebron James, que se ha ido, nada más y nada menos, que a los 30 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias. Es precisamente a ese extremo rendimiento de su jugador franquicia al que se agarran los Cavs. Porque con Lebron en sus filas todo es posible, tal y como se demostró el año pasado.
Frente al subcampeón estará un equipo que ha hecho maravillas si se tiene en cuenta la carrera de obstáculos que ha tenido que superar. Los Wizards han superado escollos muy importantes, todos en forma de lesiones. Tal es así que su trío estelar -Arenas, Jamison y Butler- sólo han podido coincidir en cancha en 11 de los 82 partidos de la liga regular. Pero justo ahora, en los playoffs, el equipo que dirige Eddie Jordan recupera a sus tres estrellas.
Para ello, el cuerpo médico ha tenido entre algodones en los últimos partidos a Caron Butler, que no ha jugado la recta final de la temporada regular para poder descansar y prepararse para la gran cita de los playoffs. Ahora, sin embargo, los capitalinos tendrán que demostrar que su rendimiento sube como la espuma al disponer de sus mejores hombres, algo que no está del todo claro. En los últimos meses un murmullo, que ha ido creciendo de tono, se ha instalado en la liga. Ese rumor no es otro que las serias dudas generadas por el rendimiento del equipo con y sin Arenas. Y es que tal vez las mejores piezas no hagan el mejor puzzle.