JORNADA NBA / PLAYOFFS 2023
Sixers supera la baja de Embiid con 45 puntos de Harden
Philadelphia gana en Boston 115-119 pese a los 39 puntos de Tatum
Ganar en Boston es posible sin Joel Embiid. Los Sixers le han dado una vuelta de tuerca a la serie con los Celtics ganando en el TD Garden el partido inaugural con una actuación deslumbrante de James Harden, que con 45 puntos igualó su mejor marca de siempre en los playoffs.
Harden, ayudado por un gran Tyrese Maxey, fue el hombre del partido, ya que además anotó un triple crucial a 8,4 segundos del final, el que puso el 115-117.
Atacó Boston para empatar o ganar, pero Marcus Smart rizó el rizo y se vio en el aire casi sin pase, perdiendo el balón. Ahí se acabó el partido para los Celtics, que poco antes del triple de Harden ya cometieron un error garrafal cuando Malcolm Brogdon entregó el balón en bandeja de oro a Maxey para que este anotara en contraataque sin oposición.
La baja de Embiid pareció una sombra demasiada alargada en la primera parte, cuando los Sixers, sin ningún protector del aro, encajaron puntos a mansalva en la pintura, incluida una buena colección de mates. Boston hizo un 85% en el tiro de campo en el primer cuarto y anotó 40 puntos desde la pintura en la primera mitad. Pero Philadelphia sobrevivió a base de triples (11 de 19 a mitad del partido), gracias a un Harden hiperactivo y de un De'Anthony Melton que enchufó 5 triples sin fallo en los dos primeros cuartos.
Pero llegada la segunda parte la cosa cambió. Muy buenos los ajustes en el descanso de Doc Rivers, que desembocaron en una mejora defensiva incuestionable de Sixers en la segunda parte, paliando parcialmente su inferioridad en la pintura y siendo capaz de darle la vuelta no solo al marcador, sino a las sensaciones en pista.
Emergió la versión más descarada y desenfadada de Tyrese Maxey en la segunda mitad y Harden siguió a lo suyo, como un martillo percutor, sin freno ninguno.
El último cuarto tuvo de todo. Los árbitros empezaron a ser protagonistas, aunque en cierto modo ya lo habían sido en los tres primeros cuartos al pitar a Boston solo 3 faltas en los primeros 36 minutos de juego.
En el cuarto final se pitaron 17 faltas por las 13 que se indicaron en los primeros tres cuartos. Y hubo como en botica. Imperdonable la agresión en toda regla de P.J. Tucker a Jayson Tatum a 5:04 del final del partido, cuando Tatum dio una asistencia por debajo de las piernas de Tucker y este respondió con un golpe intencionado en las partes íntimas del alero local. Las imágenes repetidas no dejan lugar a dudas: el movimiento es intencionado y pleno de fuerza. Pero se fue de rositas. Para los árbitros no existió.
Luego, más discutible, pero mucho más importante, la jugada en la que le pitaron falta en ataque a Maxey a 1:37 del final, porque suponía que no valía su jugada de 2+1 con 111-107 en el marcador y porque era la sexta de Maxey. Los árbitros tenían discrepancias entre ellos y revisaron la jugada. Y decidieron que era falta de Marcus Smart, por lo que Maxey se libró de ser eliminado y puso el 111-110. Muy al límite la decisión. Pudo haber un leve movimiento. Solución complicada, hay que reconocerlo.
El que no se complicó la vida en el partido fue Harden. Él siempre fue a por todas. Sabía que, sin Embiid, tenía que dar el máximo, y vaya si lo dio: 45 puntos, 6 asistencias, 17 de 30 en campo y 7 triples, incluido el crucial que anotó a 8,4 segundos del final. Hizo 15 puntos en el decisivo último cuarto.
Maxey fue su gran escudero, autor de 26 puntos y 4 robos -19 puntos tras el descanso-, Tobias Harris rubricó 18 puntos, De'Anthony Melton 17, todos en la primera mitad, y Paul Reed, titular por Embiid, 10 tantos y 13 rebotes.
Sixers tiró bien de 3, perdió muy pocos balones y mejoró notablemente en defensa a partir del descanso.
Boston fue decayendo, lógicamente, en su acierto tras el extraordinario 17 de 20 en campo del primer cuarto, pero terminó el partido aún con un notable 58,7%. Eso sí, todas las comodidades que vivió en parte de la primera mitad, con canastas fáciles junto al aro rival, se fueron diluyendo según avanzaba el juego.
Tatum se marcó un señor partido con 39 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias. Fastuoso su segundo cuarto con 20 puntos, si bien solo pudo anotar 5 en el último cuarto, Jaylen Brown brilló sobremanera en el primer cuarto y desfalleció en el resto del partido para hacer 23 puntos, y Malcolm Brogdon sumó 20, brillando en la primera parte.
A todo ello hay que añadir los 12 puntos y 7 asistencias de un Marcus Smart irregular que tuvo problemas físicos en el partido y los 11 puntos, 6 rebotes, 3 tapones y 3 asistencias de Al Horford.
Muy bajo el rendimiento de Derrick White, que estaba haciendo unos muy buenos playoffs.
Boston debió pensar que la ocasión, la pintan calva, pero lo cierto es que se dio un baño de inesperada realidad perdiendo este primer partido ante unos Sixers que demostraron que son algo más que Embiid. Eso sí, como persista la lesión del camerunés, no va a tenerlo nada fácil Philadelphia para sobrevivir en la serie.