Lakers derrota a Memphis pese al monstruoso regreso de Morant

Muchas cosas pasaron en el Lakers-Grizzlies. Pero al final de la noche lo más importante quedó del lado angelino: el triunfo. Lakers venció 111-101 a Memphis para adelantarse 2-1 en la eliminatoria. Hubo de todo: récords positivos y negativos, una actuación sublime, una expulsión...

Regresaba al juego Ja Morant. Y su vuelta se rigió por niveles estratosféricos. Morant se marcó un partido espectacular. En su haber... 45 puntos, 13 asistencias, 9 rebotes y 6 triples con un 60% de efectividad. Anotó nada menos que 24 puntos en el último cuarto. Ni un diminuto recuerdo de la mano maltrecha. Prodigioso regreso de Morant.

El partido venía precedido por unas declaraciones hirientes de Dillon Brooks hacia LeBron James. Abucheos para Brooks desde la grada ya desde el calentamiento. Intercambio de palabras entre ellos antes de empezar. Y la cosa se fue calentando. A Brooks le gusta dar la imagen de malote. Y le encanta respaldarla en la cancha con acciones muchas veces lamentables. Hoy ha protagonizado otra.

A los pocos segundos de empezar el tercer cuarto golpeó a LeBron. Manotazo en la entrepierna. Con James retorciéndose en el suelo de dolor. Flagrante 2 y expulsión. La política permisiva de la NBA con la violencia en la pista favorece el efecto llamada. Se suceden los golpes en las ingles. Se vienen pisotones. Se desprecia muchas veces la rivalidad bien entendida. Y no estamos en los 80. La sociedad es otra. Pero lo mejor es ver la acción.

La locura había llegado antes de esa justa expulsión. Porque Lakers se marcó un primer cuarto de cuento de hadas. Un primer episodio que para los Grizzlies fue una auténtica pesadilla. El resultado del cuarto... ¡35-9! Empezando así es difícil perder un partido.

Esos 26 puntos de ventaja en el primer cuarto empatan un récord NBA. Y esos 9 puntos de Memphis Grizzlies constituyen un récord negativo para la franquicia. Memphis hizo en el cuarto un 3 de 25 en el tiro de campo y perdió 6 balones.

Jugándose ya el segundo cuarto llegó la máxima ventaja del partido. Un rotundo 46-17. Nada menos que 29 de ventaja. Un abuso. Pero Memphis recuperó un poco el norte en la recta final del segundo cuarto. Para irse al descanso con un maquillado 53-37.

Lakers nunca estuvo por debajo en el marcador. Siempre dominó. Pero no terminó de rematar al rival. Marcador de 88-68 al final del tercer cuarto. Pero Morant estaba empeñado en obrar un milagro. Para ello metió 22 puntos consecutivos en el cuarto final. Sí, ¡22 consecutivos! Y su equipo se llegó a poner a 9 puntos (108-99). Pero ya era demasiado tarde.

Ganaron los Lakers. Una victoria de principio a fin. Con 31 puntos, 17 rebotes y 3 tapones de Anthony Davis. Cuajó un gran partido. El mejor jugador local.

Con 25 puntos y 9 rebotes de LeBron James. Y con 17 puntos y 7 asistencias de D'Angelo Russell y 16 puntos en 22 minutos de Rui Hachimura. El japonés está haciendo unos playoffs de ensueño.

A Lakers le costó cerrar su rebote. Y el triple no es precisamente su mejor aliado. Pero por lo demás controló el partido con solvencia.

Memphis perdió 18 bolas y apenas tuvo suplencia. Morant lo fue todo. Demasiado solo en ataque. Desmond Bane metió 18 puntos. Y Jaren Jackson Jr. firmó 13. Tras solo jugar 9 minutos en la primera mitad por culpa de las faltas. Tuvo un día aciago. Con muchas pérdidas de balón. Sin claridad de ideas.

El español Santi Aldama jugó 11 minutos. Para 6 puntos y 2 rebotes.