JORNADA NBA / playoffs 2014
Dallas gana por 21 en San Antonio pese a los 27 puntos de un gran Ginóbili
Miami sufre para derrotar a Charlotte bajo el liderazgo de LeBron James y sus 32 tantos
Estos playoffs están siendo una locura. Algunos favoritos al borde del desastre al poco de empezar, otros sin poder dominar sus series aparentemente fáciles y muchas victorias visitantes, triunfos foráneos a nivel nunca visto. Y en toda esta locura de abril, el damnificado más insigne anoche fue San Antonio Spurs.
¡Los Spurs perdieron en casa ante Dallas por 21 puntos tras extraviar 24 balones y solo lanzar 64 veces a canasta!. En realidad, solo funcionó un jugador local, el magistral Manu Ginóbili, ¡que metió 27 puntos en 23 minutos de juego!. Dallas hizo un partidazo, defendió de miedo y tuvo a muchos jugadores aportando arriba y abajo.
Miami, a diferencia de San Antonio, cumplió con el pronóstico, pero de aquella manera. Puso el 2-0 en su serie tras ganar con muchísimos apuros a Charlotte. LeBron James fue el jugador clave con 32 puntos y los Bobcats hicieron un gran partido, más aún teniendo en cuenta que Al Jefferson jugó medio cojo.
San Antonio 92 Dallas 113
Quiso el destino que anoche, antes del encuentro, Gregg Popovich recogiera el premio de Entrenador del Año. Justo en la noche en la que el laureado y prestigioso técnico de los Spurs vivió una de sus peores experiencias en playoffs de los últimos tiempos. Más que nada por la incapacidad que tuvo desde la banda para transmitir a sus muchachos algo que sirviera para aplacar el desastre.
Estamos ante una formidable sorpresa. No tanto por al victoria de los Mavericks, que también, sino por cómo se produjo, con una holgura insospechada, poco previsible.
La primera parte había acabado 51-56 tras una canasta final de Ginóbili, el mejor local de lejos, muy de lejos. Pero la segunda mitad arrojó un parcial de 41-57 que reveló hasta qué punto Dallas jugó con un equilibrio perfecto. Defendiendo a un nivel excepcional y atacando con fluidez, quebrando todas las líneas de ataque de Spurs salvo el vuelo individual de un Ginóbili inspirado.
Porque los Spurs metieron el 50% de sus tiros de campo y un 10 de 20 desde el triple, ¡pero lanzando solo 64 tiros a canasta por los 92 que intentó Dallas!. ¡Porque Spurs perdió 24 balones y Mavs solo 8!. Se puede decir que las pérdidas de balón mataron a los locales y su mala defensa, también. Y esas pérdidas de balón no se originaron en un mal partido de algunos jugadores, sino en un mal generalizado debido a la fantástica defensa de Dallas, ¡que hizo que hasta 10 jugadores de Spurs perdieran balones!.
Los Mavericks ya estuvieron a gran nivel en el primer partido y se quedaron cerca. Pues bien, esta noche han mostrado sus poderes. Jugando juntos, contribuyendo muchos jugadores a la victoria. Con Monta Ellis anotando 21 puntos y el experimentado Shawn Marion siendo el mejor del equipo con 20 tantos, 3 robos y un 8 de 10 en el tiro. Otra gran actuación de Devin Harris (18 puntos en 24 minutos), que llega fino, y bien los suplentes en general. Dirk Nowitzki no estuvo grande, pero ayudó con sus 16 puntos pese a fallar 12 tiros, y José Manuel Calderón fue de menos a más para acabar con 12 puntos y 5 asistencias en 28 minutos. Tras algunas críticas a Rick Carlisle en el primer partido, elogios máximos para él en este segundo.
En San Antonio, solo estuvo Manu. El bahiense enchufó 27 puntos y dio 4 asistencias en tan solo 23 minutos. Estuvo sembrado con un 9 de 12 en el tiro de campo y un 5 de 6 desde más allá del arco. Pero nadie le acompañó. Los siguientes anotadores fueron Tony Parker con 12 puntos y Tim Duncan con 11. Ambos, muy limitados por la defensa rival. Y nada se supo de maravillosos secundarios como Kawhi Leonard, Marco Belinelli, Boris Diaw, Danny Green o Tiago Splitter. Nada de nada.
Miami 101 Charlotte 97
Al finalizar el partido, LeBron James, el mejor de la noche, dijo:"Podemos jugar mejor al baloncesto". Y tiene toda la razón. Miami gana su eliminatoria ante Charlotte por 2-0, pero todavía no se ha puesto a jugar realmente al baloncesto. Y anoche, esa falta de su mejor baloncesto, casi le cuesta un disgusto.
A veces parece que los Heat vayan un poco sobrados cuando, en realidad, no están tan por encima de sus rivales. En este segundo encuentro de la serie, empezaron firmes con un 29-19 en el primer cuarto, pero no remataron en ningún momento pese a tener a la estrella rival, Al Jefferson, medio coja. De hecho, Jefferson se fue a vestuarios poco antes de que finalizara el primer cuarto. Tiene una lesión en un pie y aguanta como puede, como un jabato. Anoche, sin ir más lejos, jugó 40 minutos. Una verdadera hazaña.
Esa aparente superioridad local no se terminó reflejando claramente en el marcador y al final vinieron los agobios. A un minuto del final, el partido estaba sin decidir y los Bobcats no se andaban con tonterías, como se pudo comprobar con la durísima falta que le hizo Josh McRoberts a LeBron James a 50 segundos del final. Pero lo peor para los locales llegó con el acierto final de Kemba Walker. Un triple suyo puso un ajustadísimo 98-97 a 11 segundos de la conclusión. Entonces, decidieron los más grandes que estaban en la pista: LeBron James y Dwyane Wade.
James se fue a los libres con 10 segundos por jugar y no falló: 100-97. Entonces, atacaron los Bobcats para buscar el triple del empate y Miami hizo una grandísima defensa colectiva que finalizó en un lateral con un 2 contra 1 ante la amenaza de triple de Chris Douglas-Roberts... ¡y Wade le quitó el balón al atacante para cerrar el partido!.
LeBron lideró a los suyos con 32 puntos, 6 rebotes, 8 asistencias y 4 triples. Firmó, además, un 11 de 17 en el tiro. Chris Bosh apareció por fin con una serie de 4 de 5 desde el triple para meter 20 puntos y Wade añadió 15 tantos.
En Charlotte, aparición inesperada del medio enterrado Michael Kidd-Gilchrist, que terminó con 22 puntos y 10 rebotes, y gran espíritu de superación de un Al Jefferson que, lesionado, firmó 18 tantos y 13 rebotes. Kemba Walker logró 16 puntos y 8 asistencias con un 5 de 18 en el tiro y Gerald Henderson añadió 15 unidades.