Kevin Love quiere ir a Lakers, pero no está claro cómo podría aterrizar en L.A.
La estrella de los Wolves lanza una reprimenda a sus compañeros José Juan Barea y Dante Cunningham
Desde hace tiempo se intuye que Kevin Love sería feliz jugando para los Lakers. De hecho, muchos rumores le han colocado en el pasado en el equipo angelino. No es de extrañar ese deseo del jugador, ya que nació en Santa Mónica (California) y se formó en la prestigiosa UCLA.
Lo cierto es que ahora vuelve sobre el tema CBS Sports, que pone en boca de un ejecutivo de un equipo de la Conferencia Este dicho deseo: "Todo el mundo sabe que se quiere ir a los Lakers", afirma ese ejecutivo desde el anonimato.
Deseo y realidad
Pero ese deseo de Love parece chocar brutalmente con la realidad. Esa realidad impone muchas limitaciones a Love por culpa de la situación de los Lakers, una situación actual que mutila el presente del equipo, pero hipoteca ciertos movimientos de futuro.
Love tiene contrato hasta verano de 2016, pero en realidad podría salirse del mismo en verano de 2015. Esta temporada cobra 14,7 millones de dólares y la próxima 15,7.
Si quisiera irse antes de tiempo, lógicamente Minnesota, de aceptar, querría sacar algo en limpio a cambio de su estrella y Lakers no le puede ofrecer en la presente temporada absolutamente nada. La única pieza de intercambio sería Pau Gasol, pero como cobra más que Love los Lakers no podrían añadir jugadores al traspaso. Además, lo más probable es que Gasol se fuera el próximo verano a un equipo con aspiraciones al ser agente libre. Y lo que no va a hacer Minnesota es regalar a Love, más aún cuando en el pasado regaló a Kevin Garnett a los Celtics.
Por otra parte, si Lakers, como cabe esperar, se mueve en el mercado del próximo verano para fichar a un gran agente libre, no tendría dinero para pagar a Love en el verano de 2015. En fin, que una cosa es el deseo y otra cosa encajar las piezas.
Para Lakers sería un gran placer recibir a un jugador como Love que promedia actualmente 26,1 puntos, 13,2 rebotes y 4,1 asistencias y que desea jugar en el equipo, pero la realidad no juega a favor del equipo de California.
Reprobación a Barea y Cunningham
Pero Love también ha sido noticia por las duras palabras que tuvo para dos compañeros a los que no identificó en sus declaraciones, pero a los que todo el mundo puso cara: J.J. Barea y Dante Cunningham.
A la estrella de Minnesota le desagradó la actitud de ambos jugadores durante un tiempo muerto: "No podemos tener a compañeros, que juegan una buena cantidad de minutos, sentados en el fondo del banquillo durante los tiempos muertos".
Tras la denuncia de esa actitud pasiva y sin implicación alguna con el colectivo por parte de Barea y Cunningham, Love ha quitado hierro al asunto y ha señalado que simplemente era un toque de atención y que su relación con sus compañeros es buena.
También ha hablado Barea para entonar el 'mea culpa' y reconocer que tal vez su actitud en ese partido no fue la mejor, por lo que ha asegurado que no volverá a pasar.