JORNADA NBA / playoffs 2012
Denver fuerza el séptimo juego en un partido lamentable de Pau Gasol
El base Ty Lawson lidera a Denver Nuggets con 32 puntos
Gasol anota 3 puntos y captura 3 rebotes; Bryant, enfermo, el mejor Laker
Otra noche desastrosa para los Lakers en un partido de playoff y otra noche para olvidar de Pau Gasol en postemporada. El jugador español protagonizó la peor actuación que se le recuerda en toda su carrera en un partido de playoff. Su bagaje fue penoso: 3 puntos, 3 rebotes y 1 de 10 en el tiro.
Las críticas han arreciado ya sobre la pareja Bynum-Gasol. Bynum sólo hizo 11 puntos tras lanzar 11 veces a canasta, pero al menos tuvo muy buenos números en la lucha bajo tablero. Al final, fue Kobe Bryant, que estaba enfermo, el mejor con diferencia de un equipo que naufragó desde el principio y que llegó a perder por 28 puntos.
Denver fuerza así el séptimo partido tras remontar un 3-1. Su base Ty Lawson desnudó una vez más la defensa de los hombres bajos de Lakers. Lawson liderón a Nuggets con 32 puntos, su mejor marca de siempre en partido de postemporada.
Denver 113 L.A.Lakers 96 (3-3)
Primer enfrentamiento de primera ronda que asegura su prolongación hasta un séptimo partido. Los Lakers no supieron matar la serie en el Staples al perder el quinto partido y anoche hicieron el ridículo en el sexto, disputado en un Pepsi Center que disfrutó de la holgada victoria de los suyos.
Las cosas ya no comenzaron bien para los angelinos, que defendieron mal desde el principio y que se difuminaron por completo en el tercer cuarto, un cuarto que significó el definitivo principio del fin para la escuadra de Mike Brown.
Terminó el tercer período con un más que significativo 90-68 en el marcador y el último cuarto fue pura fanfarria. Minutos y más minutos de la basura que los Lakers decoraron como pudieron al final, pues llegaron a ir perdiendo por 28 puntos a 8 minutos del final (101-73).
En el Pepsi Center, un abismo separó a ambos contendientes. Los Lakers, sin equilibrio en ataque, con una defensa vergonzosa durante todo el partido, sin capacidad de reacción. Nuggets y Lakers representaron dos modos de interpretar la intensidad del baloncesto.
Denver jugó cómodo en ataque. No bajó del 50% ni el el tiro doble ni en el triple. Manejó a su antojo la situación bajo la batuta estelar de un Ty Lawson que vino a demostrar que los Lakers han mejorado en presencia ofensiva con la llegada de Sessions, pero que su laguna defensiva en los bases sigue ahí.
Lawson hizo su mejor partido ofensivo de playoffs. Jamás había metido 32 puntos en postemporada. Añadió 6 asistencias y metió 5 de 6 triples. Todo ello en 30 minutos. Le acompañó en la ofensiva el suplente Corey Brewer, autor de 18 puntos en 19 minutos. El siempre intenso Kenneth Faried, al que Bryant le hizo una falta flagrante, acabó con 15 tantos y 11 rebotes.
El equipo de George Karl anduvo sobrado. Ni siquiera precisó una actuación estelar de Gallinari y sobrevivió sin problemas a los malos partidos de Al Harrington y JaVale McGee.
Los Lakers fueron un peregrinaje de desencuentros con el buen baloncesto. Sólo Kobe Bryant, que jugó enfermo, dio un poco de dignidad a la derrota con sus 31 puntos. Sessions fue el segundo anotador visitante con 14, pero fue un agujero en defensa. Y el dúo Bynum-Gasol, lejos de dominar, fue dominado.
Bynum sólo metió 11 puntos, pero al menos se fajó con mucho poder en los tableros capturando 16 rebotes y poniendo 4 tapones. Lo de Pau Gasol, sin embargo, no tuvo perdón. Hizo un partido lamentable. Jamás había jugado tan mal en postemporada. Le pedían dar un paso hacia delante por la enfermedad de Kobe y dio varios pasos atrás. El español hizo 3 puntos y 3 rebotes en 29 minutos, con 1 de 10 en el tiro. Deberá reflexionar de cara al séptimo y definitivo partido.