Dallas derrota a los Lakers en el Staples tras remontar 16 puntos

Dallas ganó en L.A a los Lakers y les arrebató el factor cancha. Nowitzki, con 28 puntos y 14 rebotes, lideró el triunfo, mientras que Bryant hizo 36 puntos, pero tiró 29 veces sin dar una sola asistencia. Bien Gasol, aunque falló al final, y muy bien Barea en los 14 minutos que dispuso.

El español terminó con 15 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias, aunque estuvo mejor en la primera parte que en la segunda y tuvo un par de jugadas desafortunadas en los segundos finales, especialmente el balón que perdió en los últimos segundos y que puso a su equipo entre la espada y la pared, si bien su mal pase tuvo su origen en que Bryant se escurrió a la hora de ir a recibir el balón.

El puertorriqueño hizo 8 puntos y 5 asistencias en los 14 minutos que jugó. Cumplió sobradamente el de Mayagüez, que protagonizó momentos brillantes en un partido en el que Dallas llegó a estar 16 puntos abajo.

L.A. Lakers 94 Dallas 96 (0-1)

Al final, los Mavericks no tuvieron que maldecir su horrible final de segundo cuarto.

Hasta ahí, todo había resultado más o menos igualado, pero ese final de cuarto arrojó un parcial de 14-2 para los Lakers que se fueron a los vestuarios ganando 53-44 tras meter 4 tiros libres en el último segundo como consecuencia de 2 errores garrafales de 2 estrellas experimentadas de Dallas: Terry y Nowitzki.

El primero hizo una falta a Odom cuando éste tiraba de 3 desde más allá de medio campo a 0,7 segundos del final. Metió los 3 tiros libres Odom. Y a Nowitzki le pitaron técnica en la lucha por un rebote que no existió en el último tiro libre. Otro punto que cayó del lado Laker con tiro libre de Kobe.

Tras ese horrible final de la primera parte, los Mavs comenzaron la segunda igualmente mal y encajaron un 7-0, lo que encadenaba el parcial entre final de segundo cuarto e inicio de tercero a un 21-2. Fue ahí cuando los Lakers alcanzaron su máxima ventaja: 60-44.

Pero estos Lakers son así. Alcanzada esa gran ventaja se relajaron y se les fue el dominio del partido de las manos en un santiamén. Parcial de 4-17 y Dallas que volvía a tener vida: 64-61. De ese mal momento y del mal final de último cuarto, sí que se acordarán los Lakers, porque fueron momentos claves en los que se les escapó este primer partido.

Se arrepentirán los angelinos de los 2 balones cruciales que perdieron sus 2 estrellas: Kobe a 20 segundos del final tras quedarse ahogado por la defensa visitante y Pau a 3 segundos del final cuando Kidd les robó la cartera al español y a Bryant e impidió la conexión entre ambos para buscar la canasta de la victoria. Ganaban 94-95 los Mavericks.

Gasol le hizo falta a Kidd, pero éste sólo metió 1 de sus 2 tiros (94-96). Dispuso, de este modo, el equipo local del último tiro que fue, cómo no, para Bryant, pero esta vez su triple salvador no salvó nada, chocó contra el aro y provocó la decepción de la grada.

Bryant había hecho un partido colosal. Ni jugó poco -35 minutos-, ni se le vio muy lesionado. Metió 36 puntos y lanzó en esos 35 minutos 29 veces a canasta. Eso sí, con 29 tiros en su haber, no dio ni una sola asistencia. Una ratio imperdonable que contrasta con el juego colectivo de Dallas, que asistió 30 de sus 39 canastas en juego.

Tras Kobe, vino el muy buen partido de Gasol, aunque fuera, eso sí, de más a menos. Acabó el español con 15 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias en 36 minutos. Un encuentro muy completo en el que brilló en el pase -algunas de sus asistencias fueron preciosas-, pero al catalán le falta anotar un poco más en estos playoffs. Y vino también Odom, que estuvo muy bien desde la banca (15 puntos y 12 rebotes), pero que también se apagó en anotación en la segunda parte.

Los Lakers tuvieron varios problemas. Uno fue que su segunda unidad fue muy inferior a la de Dallas. Otro, que Bynum no tuvo su noche.

Dallas metió casi el 50% de sus tiros de campo, lanzó mucho mejor que el rival de 3, defendió espectacularmente las últimas jugadas del partido y tuvo como estrella máxima a un enorme Dirk Nowitzki, que acabó con 28 tantos y 14 rebotes. Terry metió 15 desde la banca y Kidd dio 11 asistencias y robó 1 balón decisivo, además de defender con gran acierto a Bryant en el último minuto.

Además, Marion, Chandler (espectacular su partido en defensa) y Stojakovic firmaron dobles dígitos ofensivos y Barea brilló en 14 minutos con 8 puntos y 5 pases de canasta.