ANÁLISIS / previa temporada 2010-2011
CONFERENCIA ESTE: Miami Heat irrumpe con su trío mágico
Boston Celtics y Orlando Magic, 'outsiders' de lujo
La sorpresa positiva puede protagonizarla Chicago Bulls
Comienza la temporada 2010-2011. Todo está listo para que la NBA eche a andar. Y en la Conferencia Este aparece de la nada un equipo construido para hacer historia: Miami Heat. LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh llevan a Florida todos los focos de la liga.
Boston Celtics queda en un segundo plano, Orlando Magic pasa a un tercero y en un cuarto se podrían situar Chicago Bulls y Atlanta Hawks.
La División Sureste (Miami, Orlando, Atlanta, Charlotte y Washington) se convierte en la gran referencia del Este, una especie de espejo de lo que ha sido en el Oeste durante los últimos años la División Suroeste.
En la conferencia oriental se embarcan sólo 7 de los 18 hispanos que competirán esta campaña en la mejor liga del mundo.
DIVISIÓN ATLÁNTICO
Boston Celtics.- Un equipazo que sería el gran favorito del Este si no fuera por la irrupción de los mediáticos e impresionantes Miami Heat.
Doc Rivers contará con una plantilla de lujo que ya ha demostrado estar a muy buen tono en pretemporada y que presenta como mayor 'handicap' su edad. Pasan los años y la experiencia empieza a convertirse en pérdida de empuje. Ese es el gran riesgo.
A los Rondo, Allen, Pierce y Garnett se suman jugadores de mucha calidad. Los más conocidos los O'Neal, Shaquille y Jermaine, un dúo que hace unos años habría sido el terror de la zona, pero que ahora se conformará con aportar lo que pueda. Delonte West y Von Wafer pueden ser ayudas al esqueleto del equipo y la sorpresa podría llegar de la mano de 2 novatos de calidad: el turco Semih Erden -al que no parece que le aguarden muchos minutos- y Luke Harangody, un 52 del draft engañoso.
Todos los puestos están bien cubiertos y Doc Rivers tiene unos asistentes de lujo con Lawrence Frank a la cabeza.
New Jersey Nets.- El equipo no tiene nada que ver con el del año pasado y es, por lo tanto, una incógnita, pues sólo continúa en él un esqueleto mínimo con jugadores como Devin Harris, Brook Lopez o Terrence Williams.
Una decena aproximada de entradas y otra de salidas. Un movimiento brutal que deberá gobernar un general de campo como Avery Johnson, que contará con muy buenas incorporaciones como Troy Murphy, Travis Outlaw, Anthony Morrow, Jordan Farmar o el novato Derrick Favors. El equipo debería mejorar. Mimbres tiene para ello.
Philadelphia 76ers.- Desde la juventud en progresión de Jrue Holiday a la veteranía en retroceso de Elton Brand, estos Sixers no parece que puedan llegar excesivamente lejos, aunque vista la desigualdad del Este entre los mejores y el resto, a lo mejor pillan algún buen autobús que les deje cerca de algún sitio.
Lo más notable es la incorporación del número 2 del draft, Evan Turner, un jugadorazo muy completo que habrá que ver cómo se adapta a la NBA. También hay que resaltar la llegada del argentino Andrés Nocioni y de un hombre interior como Spencer Hawes. Sin Dalembert pierden intimidación defensiva y no parece que el trío de referencia Iguodala-Young-Williams esté para muchas exhibiciones.
Toronto Raptors.- Otro equipo del que se puede esperar más bien poco. Sin Chris Bosh el equipo queda huérfano, sin líder, por lo que habrá que esperar a ver si el italiano Bargnani da un paso al frente y toma el relevo del texano.
Sin Turkoglu, que no se amoldó al hábitat canadiense, el equipo de Jay Triano-P.J.Carlesimo pierde a un gran jugador pero gana organización en la cancha, porque había demasiados 'bases'. Bastante tienen los Raptors con adivinar si el juego será de Calderón o de Jack o un aquí-allí sin sentido repartido a partes iguales.
Barbosa y Kleiza son 2 buenas incorporaciones, Reggie Evans tendrá que poner la dureza que le falta al equipo en casi todas las posiciones y habrá que examinar la evolución de DeRozan, Weems y Amir Johnson. Este equipo desprende demasiadas dudas.
New York Knicks.- Tampoco los Knicks ofrecen seguridad alguna. El equipo neoyorquino mantiene a 5 jugadores del año pasado. Bueno, a 4, porque uno es un lastre llamado Eddy Curry.
Los Knicks no pudieron contratar LeBron James, pero se hicieron con un Amare Stoudemire que se pondrá las botas, aunque para ello tuvieron que desprenderse del gran David Lee. Anthony Randolph y, en menor medida, Felton y el ruso Mozgov pueden aportar lo suyo, pero el equipo de D'Antoni no merece demasiada confianza.
DIVISIÓN CENTRAL
Chicago Bulls.- Puede ser una de las más agradables sorpresas del Este. El equipo de Thibodeau es favorito indiscutible para ganar la División Central, que es un auténtico páramo, un agujero negro donde la materia apenas puede verse.
Los Bulls tienen un gran equipo. Han conservado una brillante columna vertebral con Derrick Rose, Luol Deng y Joakim Noah, a la que han añadido a una estrella como es Carlos Boozer. Ya el cuarteto merece la pena y ofrece solidez, pero es que además cuentan con buenos jugadores de complemento como Taj Gibson, Kyle Korver, C.J.Watson, Ronnie Brewer o Kurt Thomas.
Habrá que ver el rendimiento del prometedor turco Asik. Y, además, han logrado todo esto desprendiéndose de muchos jugadores que aportaban poco o nada al conjunto.
Cleveland Cavaliers.- Traumática temporada post LeBron James la que le espera al equipo de Ohio. Sin James el equipo queda reducido a la mínima expresión a la hora de buscar objetivos de altura. Si a ello le añadimos la marcha de 2 excelentes veteranos como Zydrunas Ilgauskas y Shaquille O'Neal... Pues eso, el vacío interestelar.
Jamison tendrá que convertirse en la referencia ofensiva cuando ya no está para muchas florituras, a Mo Williams no se le ve con mucha convicción tras la partida de James y Varejao deberá crecer. Anthony Parker volverá a ser una parte importante en el equipo, y pare usted de contar. Casi, lo más positivo para los Cavs, la llegada de un nuevo entrenador: Byron Scott.
Los Cavaliers han hecho una notable pretemporada, pero casi todo el mundo coincide en que nada tendrá que ver con la competición oficial.
Detroit Pistons.- Éste es un equipo con posibles al que le falta personalidad y ese algo que tienen los equipos ganadores. Le falta, sobre todo, un juego interior medianamente convincente. La baja del sueco Jerebko se notará, Ben Wallace está ya de vuelta y la gran esperanza es un novato llamado Greg Monroe.
En el perímetro, hay mucha calidad: Rodney Stuckey, Ben Gordon, Richard Hamilton, Tayshaun Prince, Charlie Villanueva -al que la pintura le gusta más bien poco-... Pero no parece suficiente para alcanzar grandes metas. Además, ha llegado McGrady. Pero vamos, como si no lo hubiera hecho. Todo lo que sea tener un pedacito del antiguo T-Mac será ya un gran éxito para los Pistons.
Indiana Pacers.- Una ruina de equipo que no dará alegría alguna a Larry Bird. Granger es un gran jugador, pero nunca será un líder en la cancha y Roy Hibbert es la única esperanza de los espectadores a la hora de buscar un aliciente para acudir a la cancha.
Darren Collison y James Posey son 2 grandes refuerzos, pero el equipo es una auténtica banda. Mucho trabajo por hacer le queda a Jim O'Brien, y posiblemente estéril.
Milwaukee Bucks.- Este equipo está en manos de la salud. La salud, sobre todo, de su gran referencia, Andrew Bogut, que se ha recuperado de una lesión de envergadura. Porque de su otrora estrella Michael Redd ya cabe esperar poco visto el estado de sus rodillas y la ruina que supone pagarle el salario que se le paga por no jugar.
Estamos hablando de un equipo serio que viene de hacer una gran temporada de la mano de un notable entrenador, Scott Skiles. Un equipo que tendrá un núcleo de notable importancia integrado por el base Brandon Jennings, el argentino Carlos Delfino, John Salmons y el turco Ersan Ilyasova.
Otros hombres que pueden aportar serán Douglas-Roberts, Boykins o Gooden. Habrá que ver cómo está Maggette, un jugador que nunca terminó de convencer pero que tuvo sus buenas temporadas.
DIVISIÓN SURESTE
Atlanta Hawks.- El equipo empieza la temporada con Larry Drew, por lo que habrá que esperar qué aportación se hace desde la banda a una escuadra que amenaza con estancarse.
Los Halcones mantienen a todas sus piezas importantes (el quinteto Bibby-Johnson-Williams-Smith-Horford y a Crawford como sexto hombre). Unos jugadores que cada año están más conjuntados, pero que precisaban de algunas incorporaciones para dar un paso más, el más decisivo, paso que nunca darán porque no ha habido añadiduras que resaltar al conjunto de los últimos años. Tal vez, lo más interesante la aportación del novato Jordan Crawford en pretemporada.
Charlotte Bobcats.- Estamos ante un equipo que hombre por hombre no dice gran cosa, pero que como grupo y en manos de Larry Brown es un serio aspirante a playoffs a base de trabajo colectivo y sobresaliente ejercicio defensivo.
Stephen Jackson y Gerald Wallace volverán a ser sus hombres fuertes, apoyados en nombres como Diaw, Augustin o Tyrus Thomas. El mexicano Nájera llega al equipo, si bien los refuerzos del equipo de Carolina del Norte no han sido precisamente de tronío.
Miami Heat.- Un equipo para detenerse algo más de tiempo. Es el conjunto de moda, el que va a robar planos y más planos, el que abarrotará las canchas, el que hará gastarse la tinta de los bolígrafos a la hora de firmar autógrafos... y, sin embargo, es también una gran incógnita porque no se sabe muy bien cómo podrán convivir 3 estrellas de la envergadura de James, Wade y Bosh.
Sólo con esas 3 estrellas, el equipo debería superar sin esfuerzo las 60 victorias y acercarse a las 70. En el Este, tal vez Boston podría ponerle en algún apuro, aunque no parece que pudiera doblegar a estos Heat que alrededor de sus 'tres tenores' han logrado un conjunto de buenos, aunque muy veteranos cantantes.
El equipo mantiene a un seguro de vida llamado Udonis Haslem y ha adquirido a jugadores de valía como Mike Miller y Zydrunas Ilgauskas, a los que hay que sumar a Eddie House, Jerry Stackhouse y Juwan Howard. Aunque más de uno esté bastante pasadito ya. Además, tienen a un hispano, el puertorriqueño Carlos Arroyo, aunque no se sabe si este equipo necesitará un base para su juego.
Todo lo que no fuera el título de la NBA sería un fracaso. Aunque empezar llegando a la final ya sería un principio de dinastía prometedor. Habrá que ver si Pat Riley deja entrenar libremente a Spoelstra, porque este equipo es todo un dulce para seguir haciendo camino como técnico de leyenda. Y eso bien lo sabe el señor Riley.
Orlando Magic.- El nivel de los equipos de Florida asusta, aunque Orlando está un par de pasos por detrás de Miami Heat.
El conjunto que dirige Stan Van Gundy ha conservado su potencial con Nelson, Carter (¡qué gran pretemporada la suya!), Lewis y Howard, aunque éste, para convertirse en un auténtico líder aún tendrá que tomar algunas clases magistrales de Pat Ewing en caso de que no haya aprendido lo suficiente de Olajuwon.
Además de ese formidable cuarteto, cabe añadir jugadores secundarios de nivel como Redick, Ryan Anderson, Brandon Bass, Pietrus o Gortat, y la llegada de Quentin Richardson, aunque se trate de un jugador venido a menos.
El equipo seguirá en lo alto, pero no parece que vaya a ir a mucho más. Han perdido a Barnes, una potencia defensiva que se fue a los Lakers, y desde que dejaron escapar a Turkoglu no son lo mismo.
Washington Wizards.- Finalizamos el repaso al Este con unos Wizards que son una incógnita, una incógnita que comienza en su perímetro con la incorporación del número 1 del draft, el enorme John Wall, y la recuperación del tal vez irrecuperable Gilbert Arenas.
Junto a ellos, jugadores como Josh Howard, Blatche, McGee o Al Thornton y adquisiciones como Hinrich y el chino Yi Jianlian. Seguro que mejoran, pero los de Flip Saunders deberán resolver algunas dudas serias, sobre todo en su juego interior.