JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2009-2010
Luis Scola incendia el Garden y siembra aún más dudas sobre los Celtics
El argentino hace 27 puntos, 11 rebotes y anota 2 canastas decisivas en la prórroga
Cleveland derrota a Atlanta por escaso margen en el gran duelo del Este
Grande, muy grande Luisito Scola, que anoche se doctoró en el Garden dejando un reguero de dudas pendientes sobre Boston Celtics. Ganaron los Rockets en la prórroga, en la que 'Luifa' anotó 2 canastas decisivas al final. El argentino, Brooks y Budinger sentenciaron el choque.
Tremendo el ala-pívot de Houston, que terminó con 27 puntos y 11 rebotes tras jugar 51 minutos de los 53 posibles. La fe de su entrenador, Rick Adelman, en él es, ahora mismo, ilimitada. Un Adelman que al final del encuentro aseguró que ésta ha sido “probablemente, nuestra mejor victoria del año”.
Mientras, Atlanta no pudo sorprender a Cleveland en el gran partido entre equipos de arriba del Este. El encuentro, disputado en Ohio, fue aún así muy igualado. Horford rindió bien con 13 puntos y 8 rebotes.
Menos rindieron Arroyo en la victoria de Miami en la prórroga en cancha de Indiana, con 43 puntos de Wade, y Villanueva en la derrota de los Pistons en su casa frente a Phoenix, que sigue en racha.
Boston 114 Houston 119 (tras prórroga)
No es la primera vez que Scola brilla ante Boston Celtics y ante Kevin Garnett. Anoche lo volvió a hacer, pero en esta ocasión lo hizo a lo grande. Lo suyo fue un festival brillante de baloncesto que acabó en éxito.
Porque Houston ganó a los Celtics en Boston con lo puesto. Se presentaban los de Adelman sin toda su batería de escoltas y aleros más importantes (Battier, Kevin Martin y Trevor Ariza, que estaba enfermo), tampoco contaban con David Andersen, un jugador sólido que puede aliviar de minutos a Scola... y claro, éste es un equipo que no ha contado todo el año con Yao Ming y Tracy McGrady.
Con ese panorama aparecían los Rockets en el Garden para enfrentarse a unos Celtics que acudían a la cita con todo, con su quinteto titular de gala al completo y con una suplencia con nombres como Rasheed Wallace, Michael Finley, Nate Robinson, Marquis Daniels, Glen Davis, entre otros. Talento y experiencia para aburrir.
Pues bien, Adelman salió del mítico pabellón bostoniano con el pecho por las nubes, encantado con lo que había visto, orgulloso de sus jugadores.
Y entre esos jugadores hubo 3 excepcionales: el base Aaron Brooks, el novato Chase Budinger y Luis Scola, que estuvo inconmensurable.
El argentino dio una lección de juego en los dos lados de la cancha. Defendió con entrega y conocimiento, pero es que en ataque siguió en su línea de marzo, es decir, a pleno rendimiento. Sus estadísticas lo dicen todo: 27 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias en 51 minutos de juego, porque Adelman le tuvo prácticamente toda la noche sobre el parquet.
Anotó 11 de sus 22 tiros de campo y 5 de sus 6 intentos desde la línea de personal, Poco importó que perdiera 6 balones, porque él y Brooks decidieron el partido.
Primero fue el base (espléndido con 30 puntos, 9 asistencias, 3 robos y 4 de 6 en el triple). Ese momento de Brooks llegó cuando se levantó desde la línea de triple a 9 segundos del final del tiempo reglamentario y empató el partido a 109 para llevarlo a la prórroga y salvar a los suyos.
Luego, en el tiempo extra, fue el momento de Scola y Brooks, cómo no. Luisito anotó 2 canastas consecutivas fundamentales que dieron la vuelta al marcador dejándolo en 114-117 a 51 segundos del final, 2 canastas con toda la presión encima -la de la grada, la del marcador, la de su franquicia...-. No falló. Está bien curtido en estas lides a estas alturas de la película, aunque en Estados Unidos no hayan conocido sus hazañas europeas... Después, nuevamente apareció Brooks para cerrar el partido con 2 tiros libres a 11 segundos del final de la prórroga (114-119).
Además de ellos, hay que citar el partidazo de Chase Budinger, un fantástico novato que está haciendo una buena temporada desde la suplencia y que ayer fue titular por mor de las circunstancias. El bueno de Budinger le endosó a los Celtics 24 puntos tras convertir 6 de sus 8 intentos triples. Una auténtica ametralladora.
Ésa fue una de las circunstancias importantes, el triple. Los texanos lograron 12 de 18 desde más allá del arco. Y mostraron su templanza con su 25 de 28 en tiros libres. En esas dos facetas fueron muy superiores a Boston.
Los Celtics nunca fueron capaces de hacer realidad su teórica superioridad, no aprovecharon las 22 pérdidas de balón de su contrincante y terminaron claudicando ante su público a pesar de los buenos partidos de Pierce (27 puntos sin abusar del tiro) y Rondo (23 puntos, 10 asistencias y 5 recuperaciones). En el lado opuesto estuvieron Ray Allen -5 puntos en 16 minutos- y Kevin Garnett -12 puntos, 3 rebotes y superado en la pintura una y otra vez-.
Cleveland 93 Atlanta 88
Partido tremendamente atractivo, preámbulo de lo que pueden ser dos rivales directos por el título en la Conferencia Este. Y no defraudó.
Duelo en la cumbre oriental que fue, tal y como se presagiaba, un partido duro, defensivo, más de playoff que de temporada regular... Serio, muy serio el partido disputado en el Quicken Loans Arena.
La victoria le sirvió al equipo de LeBron James para alcanzar su triunfo número 60, toda una cifra que sólo ha podido lograr hasta ahora el mejor equipo de la NBA esta temporada. Y le sirvió, de paso, para mantener su excelente trayectoria ante sus aficionados -34 victorias por 4 derrotas-. Pero no fue fácil.
De hecho, el encuentro fue un homenaje al equilibrio. La máxima diferencia en el parcial de un cuarto fue de 3 puntos y 2 de los 4 parciales acabaron en empate. Eso sí, Atlanta no fue capaz de imponerse en ninguno de ellos. Una igualdad que se quebró mediado el último cuarto.
Porque el partido lo ganaron los Cavs defendiendo a muerte, una defensa que dejó durante 5 minutos y medio del último cuarto en blanco a su rival.
Todo discurría igualado. Horford adelantó a los suyos con 2 tiros libres (74-76 a 6:43 del final). A partir de ahí, la intensidad defensiva local se incrementó y el ataque visitante se atascó de un modo atroz. Resultado de tal situación, un parcial de 14-0 que llevó el luminoso a un inapelable 88-76 cuando quedaba poco más de 1 minuto para el final. Esa tremenda laguna de más de 5 minutos sin anotar le había costado el partido a los Hawks, que se mantuvieron en pie de igualdad con Cleveland en todas las facetas, salvo en el rebote, y eso que no jugó Varejao.
LeBron James y Mo Williams lideraron a los locales. James acabó con 27 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias; Williams hizo 24 tantos y ¡4 tapones! (sorpresas da la vida). Además, J.J.Hickson capturó 16 rebotes e Ilgauskas atrapó 10 saliendo del banquillo.
En Atlanta, Josh Smith hizo 20 puntos y colaboró, como siempre, en muchos aspectos del juego, Crawford sumó 17, aunque estuvo muy irregular en el tiro, y Marvin Williams añadió 15 con 7 rebotes y 3 robos. Joe Johnson no estuvo fino y Al Horford estuvo correcto, acabando con 13 puntos, 8 rebotes, 2 tapones y 3 asistencias en 37 minutos en los que anotó 5 de sus 13 tiros dobles.
Indiana 96 Miami 105 (tras prórroga)
Danny Granger tuvo el tiro de la victoria casi sobre la bocina, pero erró. El partido acabó con empate a 89 y tuvo que jugarse la prórroga. Y ahí no hubo color. Parcial de 7-16 para los Heat y victoria importante.
En ese tiempo extra anotaron hasta 4 jugadores visitantes, aunque el que rompió el partido fue Wade con 3 canastas consecutivas que llevaron el electrónico a un esclarecedor 96-103 a 47 segundos del final.
Wade fue el dueño y señor del partido. Estuvo deslumbrante. Su carta de presentación para próximos compromisos dice así: 43 puntos, 9 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y 3 tapones. Casi nada. Tras él, poco que destacar. Beasley, Wright y Chalmers alcanzaron la decena y Haslem atrapó 11 rebotes.
En cuento a Arroyo, volvió a ser titular, disputó 27 minutos, pero no tuvo un día demasiado ágil en el juego. Hizo 5 puntos, 4 rebotes y 1 asistencia y anduvo desacertado en el tiro (2 de 9).
En el lado contrario, muy bien Troy Murphy (29 puntos y 15 rebotes) y regular Granger, que sumó 25, pero con 6 de 22 en el tiro, incluido 1 de 8 en el triple. Y además, falló la canasta que hubiera supuesto la victoria local.
Detroit 94 Phoenix 109
Décima victoria consecutiva de los Suns, que esta vez la consiguieron con pasos lentos pero seguros. Ganaron los visitantes los 4 parciales de la noche por cortas distancias, pero la suma de esas cortas ventajas hicieron plácido el final del choque para los de Arizona.
El partido tuvo más técnicas que historia. Demasiada tensión para tan poca chicha. Porque los Suns impusieron su ley, especialmente desde el triple, desde donde machacaron al rival. Los visitantes anotaron 15 de 29 triples por 2 de 11 los locales. Un abismo.
Los Suns encestaron el 56,2% de sus tiros, dieron 31 asistencias y sólo perdieron 11 balones... No hubo color. Y eso que Nash apenas se dejó ver (9 puntos y 7 asistencias).
Fueron otros los protagonistas. Stoudemire (29 puntos con 13 de 15 tiros dobles), Dudley (20 con 6 de 7 triples) y Grant Hill (17 tantos, 6 rebotes y 8 asistencias).
En Detroit, Villanueva volvió al juego tras su falta de comunicación con su entrenador. Aportó poco, tan solo 6 puntos y 2 rebotes y 18 minutos. Ben Gordon salió de su escondite e hizo 21 tantos en 26 minutos, Prince agregó 17 y Jerebko 14 con 10 rebotes.