Allen Iverson vuelve a Philadelphia tras protagonizar una ridícula retirada

La retirada de Allen Iverson puede considerarse, sin ningún género de dudas, como una de las más ridículas de la historia del deporte. El base virginiano regresará a las filas de Philadelphia 76ers tras permanecer 'retirado' una semana del baloncesto. La cosa parece de chiste.

Su comunicado de despedida ya hacía presagiar que todo se trataba de un contubernio con el periodista del Philadelphia Inquirer en cuyo blog se publicó la retirada del jugador. Ese comunicado hacía presagiar más un hasta luego que un adiós, asegurando en él Iverson que le quedaba pasión y gasolina para seguir jugando a este deporte.

Aquel escrito parecía más un ofrecimiento que un legado destinado a sus aficionados. Y así ha sido. Apenas unos días después del mismo, uno de sus antiguos equipos, Philadelphia, con el que vivió sus años de mayor gloria deportiva, ha decidido repescarlo.

El fichaje de Iverson por los Sixers ha sido confirmado hoy por el propio jugador, que ha asegurado que ha aceptado la oferta sin garantizar por un año que le ha extendido el club.

También el presidente de Philadelphia 76ers, Ed Stefanski, ha hablado ya de la que es la gran noticia del día, el regreso del hijo pródigo a Filadelfia. “A la luz de la lesión de Lou Williams, creímos que Allen era el mejor agente libre disponible”.

Una circunstancia clave

Esa lesión, la de Lou Williams, parece ser una de las grandes claves del acuerdo. El jugador se lesionó y parece que puede tener para 8 semanas, dejando huérfano al equipo en el ya frágil puesto de base, aunque Williams sea en realidad más un escolta que un organizador del juego.

Ahora, Philadelphia ha dejado los mandos de la nave a un chico nacido en 1990, Jrue Holiday, una responsabilidad que, claro está, le viene demasiado grande, tal y como se está comprobando.

En esta tesitura, parece claro que Iverson puede jugar un papel muy importante en la estructura del equipo, ya que su experiencia y calidad en un conjunto huérfano de líderes en el puesto de base le puede otorgar muchísimos minutos en cancha, todos esos que parecían faltarle en Memphis, donde la experiencia de esta temporada ha sido un visto y no visto.

Todo apunta a que Iverson, cuyo acuerdo contractual no ha sido revelado, podría debutar el próximo lunes en casa ante Denver Nuggets, otro ex equipo, el último con el que rindió a un aceptable nivel antes de sus decepcionantes aventuras en Detroit y Memphis.

Una carrera impresionante

De este modo, Iverson retoma una carrera sin duda impresionante, cuya trayectoria le ha llevado a jugar 889 partidos de temporada regular (con una media de 27 puntos por encuentro) y 71 de playoffs (en los que promedió 29,7).

El jugador nacido en Hampton (Virginia) hace 34 años vuelve al equipo con el que más brilló, al conjunto en el que aterrizó en la NBA en 1996 y en el que permaneció 10 temporadas y media.

En todas ellas superó los 20 puntos de media y en 5 se fue más allá de la barrera de los 30 tantos por noche.