Los Lakers sufren ante los Clippers y Dallas casi asegura su clasificación

Los Lakers volvieron a dar ayer nuevos síntomas de cansancio y del preocupante rendimiento de su segunda unidad. Cinco minutos de vacío anotador a punto estuvieron de costarles un partido que dominaban con claridad. En Dallas, los Mavs casi sellaron su octava posición al arrollar al único aspirante a la misma, los Suns.

En Los Ángeles, Gasol y Ariza cumplieron su labor y creían haber dejado el partido sentenciado cuando se sentaron en el banquillo. Pero la segunda unidad permitió que los Clippers se animaran en los últimos minutos y a punto estuvieron de remontar 19 puntos de desventaja en poco más de 6 minutos.

Mientras, en Texas, los Suns se dedicaron a mirar el festival anotador de unos Mavericks que anotaron 81 puntos en la primera mitad abusando de la indolencia de la defensa visitante. Barea, saltó en el quinteto titular y tuvo una buena actuación.

L.A. Lakers 88 L.A.Clippers 85

Un día más la relajación en los minutos finales y el cansancio que parecen acumular los Lakers en este final de temporada estuvieron a punto de costarles un disgusto. A 6 minutos del final, ganaban a sus convecinos, los Clippers, por 19 puntos y sin embargo, Baron Davis tuvo en sus manos un lanzamiento para llevar el partido a la prórroga.

Pero por encima incluso de la relajación y el cansancio, preocupa el rendimiento de una segunda unidad que está haciendo una temporada muy irregular. floja en general, y que de no mejorar su rendimiento será un serio obstáculo para que los Lakers consigan su objetivo, que no es otro que el título de campeón.

Ayer, todo parecía decidido a 7 minutos del final con esos 19 puntos de ventaja. Tan decidido, que Bryant estaba en el banquillo y Phil Jackson decidió sentar a Gasol y Powell dejando en pista un quinteto formado por Farmar, Vujacic, Walton, Odom y Mbenga. Un quinteto que, en menos de 2 minutos, logró encajar un 9-0 y permitió que los Clippers se volvieran a meter en el partido.

Jackson tuvo que poner a todos los titulares en pista de nuevo, pero para entonces los Clippers eran un equipo crecido y los titulares de los Lakers hombres cansados a los que, tras sentarse creyendo haber dejado el partido decidido, les costó volverse a centrar sobre la pista. El resultado fue que los Clippers siguieron recortando la ventaja ante la incapacidad de los Lakers para anotar.

Para cuando Bryant sumó, a 2 minutos del final y en forma de 2 tiros libres, el 83 a 78 en el marcador, los Lakers llevaban 5 minutos sin anotar un solo punto y cuando a 50 segundos del final, Gasol anotó la canasta que resultaría decisiva, los aficionados locales llevaban 6 y medio sin ver una canasta de campo de su equipo.

Fueron la raza de Gasol y el temple de Bryant, lo que permitió salvar los muebles a los Lakers en el último instante. Tras la canasta del pívot español, Randolph falló un primer intento de empatar el encuentro. Ariza se hizo con el rebote y Bryant acabó en la línea de tiro libre, desde donde no falló. Quedaban 10 segundos, pero los Lakers estaban lejos de resolver el encuentro.

Un triple de Gordon acortó a 2 la diferencia y el posterior fallo de Fisher en 1 de sus 2 tiros libres dio una última oportunidad de empatar a los Clippers con 5 segundos por jugar. Baron Davis lo intentó, pero su triple, bien defendido por Ariza, no entró.

Gasol terminó con 14 puntos y 9 rebotes y Ariza con 9 puntos, 6 rebotes y 3 robos y Phil Jackson con un enfado más que notable con sus jugadores que, con actuaciones como la de anoche, inspiran poca confianza a sus aficionados de cara a la fase final.

Los números:

• L.A. Lakers: Odom 18pt y 10 reb; Bryant 18 pt y 5 as; Gasol 14 pt y 9 reb.
• L.A. Clippers: Gordon 24 pt y 8 reb;Randolph 18 pt y 10 reb.
• Los Clippers anotaron un 37% de sus lanzamientos y los Lakers un 42% y un paupérrimo 59% de sus tiros libres.
• Ambos equipos anotaron 5 triples, pero tras lanzar 20 veces los Lakers y 21 los Clippers.
• El público ovacionó a Kareem Abdul-Jabbar en el día en que se cumplían 25 años desde que se convirtiera en el máximo anotador de la historia de la NBA por delante de Wilt Chamberlain.

Dallas 140 Phoenix 116

Dallas y Phoenix se enfrentaban ayer a cara de perro en la última oportunidad de los de Arizona para disputar a los texanos la octava plaza del Oeste. Los Mavs salieron dispuestos a no dejarse sorprender en su terreno y lo lograron. Un parcial de 42 a 26 en el segundo cuarto les llevó al descanso con un 81 a 59 que sentenció el encuentro.

Encajando ¡81 puntos! en la primera parte, los Suns no podían pretender llegar muy lejos. A la nula intensidad defensiva de los visitantes en esa primera parte se unió el tremendo acierto de los locales, que cerraron el segundo cuarto con un triple anotado por Josh Howard desde la línea de 3 puntos... ¡de su campo defensivo!.

Y es que el acierto de los locales -60% en tiro de campo, 15 de 25 triples y 92% en los tiros libres- se contagió incluso a sus aficionados, como el que bajó de las gradas en el descanso para anotar de forma consecutiva un tiro libre, un triple y un lanzamiento desde el medio campo para llevarse más de 3.000 dólares de premio.

Los Mavs estuvieron perfectamente dirigidos por Jason Kidd, que repartió 20 asistencias, y hasta 7 jugadores superaron la decena de puntos. Uno de ellos fue José Juan Barea, que finalizó con 12 puntos y 5 rebotes en los 27 minutos que estuvo en pista. El puertorriqueño lanzó con acierto, 2 de 3 triples, y realizó un buen encuentro. Nowitzki y Howard fueron los máximos anotadores locales.

En los visitantes, también hubo 7 jugadores por encima de la decena de puntos y Barbosa y Hill estuvieron por encima de los 20, pero sorprendió la falta de actitud del conjunto que dirige Alvin Gentry en el partido más decisivo de los que afrontaban en este final de temporada. Cualquiera diría que tenían más ganas de asegurar unas largas vacaciones que de intentar entrar en la fase final.

Los números:

• Dallas: Nowitzki 28 pt (10 de 12 tc); Howard 24 pt; Kidd 19 pt y 20 as; Terry 18 pt (4 de 6 t3).
• Phoenix: Barbosa 24 pt; Hill 23 pt y 6 reb.
• Jason Kidd supera ya a Magic Johnson en la lista de máximos asistidores de la historia, en la que es tercero. Además, se convirtió en el segundo jugador más veterano (36 años y 13 días) en alcanzar las 20 asistencias en un partido, sólo superado por Lenny Wilkens que en noviembre de 1973 las alcanzó con 36 años y 30 días.