Los Lakers pierden por primera vez con Pau Gasol como máximo encestador
Desde que llegara a L.A cada vez que Pau fue el mejor anotador su equipo ganó
Las radiografías descartan una lesión en la mano del jugador español
Anoche se rompió en el Staples Center una curiosa estadística que habla bien a las claras de la importancia de Pau Gasol como Factor X del éxito de los Lakers. Fue la primera vez que el equipo perdió siendo el español el máximo encestador de su escuadra.
Desde que Gasol llegara a los Lakers en febrero de 2008 había una máxima que no se había roto en su más de un año de estancia en el equipo. Cada vez que el ala-pívot catalán encabezaba la estadística de anotación de los suyos su equipo ganaba el partido.
Todo empezó el mismo día en el que debutó, un 5 de febrero de 2008 en el IZOD Center de East Rutherford, donde los Lakers ganaron a los Nets y Gasol fue el mejor hombre del partido con 24 puntos, 12 rebotes y 4 asistencias.
Tras aquel fantástico debut, el jugador hispano ha disputado 93 partidos con la elástica de los Lakers, ganando su equipo 74 encuentros y perdiendo sólo 19. En esas 74 victorias, Pau ha sido 12 veces máximo anotador, algo normal teniendo en cuenta la dictadura de Kobe Bryant. En las 11 primeras ocasiones se cumplió la relación Gasol-victoria, pero anoche ante Philadelphia se rompió esta mágica situación.
En el último segundo
Tuvo que ser sobre la bocina. Porque tras la canasta de Kobe Bryant a 6 segundos del final todos los números volvían a cuadrar. Gasol era el máximo encestador local con 25 puntos y su equipo ganaba 93-91. Pero llegó Iguodala y anotó un impresionante triple sobre la bocina que derrotó a los angelinos (93-94) y echó por tierra la estadística que emparentaba el liderazgo de Gasol con la victoria de los suyos.
Era la sexta vez que el español terminaba como máximo realizador de los Lakers en un partido de la temporada 2008-2009. Ahí murió esta estadística, una más de las miles y miles de estadísticas que jalonan el universo NBA.
Que Gasol sólo haya sido 12 veces máximo anotador de los Lakers en los 74 partidos ganados no debe de extrañar. La mayoría de las veces ese puesto es exclusivo de Bryant. El español es un hombre que se caracteriza por su tremenda regularidad, a veces llevada al extremo. Por ejemplo, en febrero, cuando fue elegido Mejor Jugador del Mes en el Oeste, no lideró ni una sola vez la anotación de su equipo en un partido.
A cambio, la estadística de Gasol es digna de elogio en aspectos relacionados con la regularidad. Ahora mismo lleva 56 partidos consecutivos no bajando de la decena de puntos y en 15 de sus últimas 23 actuaciones ha anotado 20 o más puntos.
Éxito ante los más grandes
Pero lejos de los números, que a veces pueden resultar fríos, el público se ha quedado con la exhibición ofrecida por el jugador catalán, tanto en ataque como en defensa, en su tríptico texano: victorias ante Houston, San Antonio y Dallas y superioridad de Gasol sobre Yao Ming, Tim Duncan y Dirk Nowitzki. Se trata de palabras mayores.
Así lo reconocen los diarios californianos, que cada vez apuestan más por la estrella española, abogando por que el juego se cargue cada vez más en el poste para que Gasol y su equipo puedan brillar al máximo.
También se hacen eco los medios de comunicación de esa triple actuación de Gasol ante los conjuntos texanos. The Press-Enterprise, por ejemplo, ya se hizo eco de la situación antes de jugar ante Dallas, cuando el jugador de los Lakers había superado de forma consecutiva a Ming y Duncan.
Entonces, Pau afirmaba que "si quieres ser el mejor tienes que jugar contra los mejores y ganarles" y añadía: "estoy compitiendo duro en la pista".
También decía que a estas alturas de la temporada uno siente ya el cuerpo dolorido y las piernas cansadas, pero que la motivación es tal que supera el cansancio, aunque un poco de descanso no le vendría mal teniendo en cuenta las minutadas que se está marcando en la pista desde que falta Bynum.
Sin problemas en la mano
Por otra parte, la última hora que llega de Los Angeles nos dice que Pau Gasol no sufre lesión alguna en el dedo meñique de su mano derecha, zona que se golpeó anoche en una jugada con Andre Iguodala.
Las radiografías a las que ha sido sometido revelan que no existe fractura alguna y que se trata sólo de un golpe. Aún así, su participación en el próximo partido ante los Warriors está en el alero.