Manu Ginóbili regresa a las canchas como pieza decisiva de la victoria de los Spurs sobre Memphis

Argentina volvió a disfrutar anoche, y todo buen aficionado al baloncesto. Regresó Ginóbili y con él la calidad y el espíritu ganador de un jugador y un equipo, los Spurs. En sólo 11 minutos el de Bahía Blanca anotó 12 puntos que fueron decisivos.

A su lado otro argentino, Fabricio Oberto, al que como es habitual le tocaron otras labores más ingratas, más sucias, pero no por ello menos necesarias. Unas y otras, la calidad de Manu y el tesón y fortaleza de Fabri, sirven para ganar partidos como el que anoche ganó San Antonio en Memphis.

En el otro lado de la cancha, como rival, un español llamado Marc Gasol, que volvió a demostrar que es el jugador más coherente de Memphis Grizzlies y debería de ser junto a O.J.Mayo la pieza sobre la que el equipo debería construirse.

Mientras, el dominicano Charlie Villanueva completaba un muy buen partido que resultaba inservible a nivel colectivo, ya que los Bucks cayeron en Orlando y además perdieron por una lesión a Andrew Bogut.

Por su parte, Andrés Nocioni pudo cantar victoria con sus Bulls. Fue a falta de 1 segundo para la conclusión, gracias a una canasta de Larry Hughes.

Memphis 81 San Antonio 94

Argentina vive a partir de ahora con un grado mayor de pasión el discurrir de la NBA. Regresó Ginóbili, su hijo más querido, un baloncestista que tiene una legión de seguidores no sólo en su país, sino también en todo el mundo.

Tras un largo peregrinaje por médicos, gimnasios y rehabilitaciones por culpa de su maltrecho tobillo izquierdo, el escolta de los Spurs pudo por fin debutar en la presente temporada. Lo hizo anoche, tal y como avanzó hace unos días, aunque el cuco de Popovich desmintiera tal posibilidad para no dar ninguna pista a su rival.

Faltaban 5:34 para concluir el primer cuarto cuando el de Bahía Blanca pisó la cancha por primera vez, y en seguida se vio que su pie estaba bien y que Manu iba a jugar poco pero de forma intensa. Empezó con un triple y continuó con un mate a pase de su compatriota Oberto, pero lo mejor lo dejaría para el tercer cuarto.

Fue ahí donde se decidió el partido. Con 49-52 para los visitantes Marc Iavaroni sienta a Marc Gasol. Restaban 4:20 para finalizar el tercer período.

Es en ese momento cuando Ginóbili encadena 6 puntos que encienden la mecha, una mecha encendida que se transforma en un parcial de 6-20 cerrado con 8 puntos seguidos de un extraordinario novato llamado George Hill. Entre Gino y Hill habían incendiado el encuentro al dejar el marcador a falta de un cuarto en un casi definitivo 55-72.

Hill, Mason, Duncan y Ginóbili (12 puntos y 4 rebotes en 11 minutos) fueron las armas ofensivas de los Spurs, si bien Duncan estuvo muy bien defendido por Milicic, que salió de titular, defendió como nunca y acabó con un meritorio doble-doble.

El serbio fue, junto a un brillante Mayo y un sólido Gasol, de lo mejor de su equipo, un equipo que tuvo, como es su costumbre, dos lastres difíciles de salvar: su pretendido jugador franquicia, Rudy Gay (6 de 19 en el tiro), y su entrenador, Marc Iavaroni.

Memphis ha entrado en una peligrosa dinámica negativa, mientras que los Spurs abandonan los números rojos y ya están por encima del 50% de victorias.

A 8 minutos del final se podía ver a Ginóbili y Duncan charlando animadamente en el banquillo. A los 2 se les veía dibujada una gran sonrisa en la boca.

Los números:

• Memphis: Mayo 26 pt; Milicic 11 pt y 11 reb.
• San Antonio: Hill 20 pt en 29 min; Mason 18 pt con 5 de 7 triples; Duncan 14 pt (6 de 18 en el tiro), 11 reb y 4 tp.
• Los Grizzlies anotaron el 39% de sus tiros de campo y sumaron 10 asistencias.
• Mayo y Gay lanzaron 40 de los 77 tiros del equipo.

Utah 100 Chicago 101

Los Bulls ganaron ‘in extremis’ en una de las canchas más difíciles de la NBA, el EnergySolutions Arena de Salt Lake City.

El final del partido resultó vibrante y en él emergieron como grandes protagonistas, antes de las 2 últimas jugadas, el novato Derrick Rose por Chicago –que anotó 6 puntos en el último minuto y medio- y el turco Mehmet Okur por Utah –que logró 4-.

Ellos fueron los que mantuvieron un toma y daca en el marcador que sembró de emoción la grada, más aún cuando a 11 segundos del final C.J.Miles anotaba el 100-99 para los locales. Quedaba una última posesión para Chicago.

Entonces el balón llegó a Rose, que terminó con 25 puntos y 9 asistencias. El novato estaba en vena y no había que desaprovecharlo. Pero esta vez el grandísimo jugador que es Rose no pudo acertar su tiro y dejó toda la gloria en manos de un jugador experimentado, Larry Hughes, que atrapó el rebote ofensivo y anotó un tiro muy lejano de 2 cuando faltaba 1 segundo para que expirara el encuentro: 100-101 y por fin Hughes lograba lo que venía pidiendo con insistencia en los últimos días, tener un mayor protagonismo en estos Bulls. Y vaya si lo tuvo.

El partido había llegado al descanso con 45-53 para los visitantes pero un gran tercer cuarto de los locales (30-19) había equilibrado el electrónico y parecía haber puesto a los de Jerry Sloan con cierta ventaja psicológica sobre su rival. Sin embargo, no fue así y todo se decidió en el último suspiro.

Rose, Gooden y Hughes fueron los mejores Bulls y Okur, Millsap y Brewer los mejores Jazz. Mientras, el argentino Nocioni saltó 19 minutos a la pista y anotó 7 puntos.

Los números:

• Utah: Okur 26 pt y 9 reb; Millsap 21 pt y 10 reb; Brewer 18 pt.
• Chicago: Rose 25 pt y 9 as; Gooden 18 pt y 6 reb; Hughes 16 pt.
• Ambos equipos superaron el 50% en el tiro de campo.

Orlando 108 Milwaukee 101

Gran partido del dominicano Charlie Villanueva (17 puntos y 9 rebotes en 25 minutos) que de nada sirvió a los suyos.

Los Bucks plantaron cara a Orlando Magic en el Amway Arena, pero acabaron sucumbiendo ante un rival muy poderoso y un arbitraje bastante casero. Sólo así se puede explicar el tremendo desequilibrio que existió en la señalización de faltas personales, un desequilibrio que decidió el encuentro, ya que los locales fueron 54 veces a la línea de tiros libre por 21 Milwaukee. Todo ello porque los árbitros pitaron el doble de faltas a unos que a otros (20 a los Magic y 39 a los Bucks).

Y precisamente las faltas no fueron sólo la clave cuantitativa, sino también cualitativa. Este matiz hay que explicarlo, una explicación que se centra en el juego interior y en el gran duelo de la noche entre Howard y Bogut.

El australiano había completado una excelente primera parte en la que había anotado 16 puntos y había ahogado la ofensiva de Howard, pero cuando se las prometía felices vivió 1 minuto de pesadilla que difícilmente olvidará. Ocurrió nada más comenzar el tercer cuarto.

Bogut cometió 3 faltas personales en 52 segundos al intentar parar las acometidas de Howard y con 4 faltas se fue al banquillo. Pero eso no fue lo peor. Instantes después abandonaba el banquillo y se iba a los vestuarios para no volver debido a un problema en su rodilla izquierda. A partir de ahí Howard fue una fiera indomable en la zona.

No fue Bogut el único daminificado de la noche. Los locales también perdieron a uno de sus titulares, el base Jameer Nelson, que abandonó el partido lesionado.

A pesar de todas estas vicisitudes, los Bucks todavía tuvieron el arrojo suficiente para llegar con opciones al final, situándose a 3 puntos a 23 segundos de la conclusión (103-100), pero Turkoglu y Lewis decidieron desde la línea de tiros libres.

Los números:

• Orlando: Howard 24 pt, 13 reb y 6 tp; Turkoglu 22 pt y 9 reb; Lewis 22 pt.
• Milwaukee: Jefferson 25 pt (11 de 16 en el tiro); Villanueva 17 pt y 9 reb en 25 min.
• Los Magic ganaron a pesar de robar 3 balones y perder 18.