El nuevo general manager de los Hawks ilusionado con el potencial del equipo

El pasado miércoles se hizo oficial el nombre del nuevo general manager de los Atlanta Hawks, el equipo en el que milita el pívot dominicano Al Horford. Se trata de Rick Sund, un veterano de los despachos de la liga, que en sus primeras declaraciones a los medios ha dejado claro su ilusión por trabajar en un equipo cargado de potencial.

Sund, de 56 años y hasta el pasado año general manager de los Sonics, sustituye a Billy Knight que ocupó el cargo los últimos 5 años y presentó su renuncia tras la derrota de Atlanta ante Boston en la primera ronda de la fase final de la liga, fase final que los Hawks no alcanzaban desde 1999.

El nuevo responsable deportivo de la franquicia tiene ante sí el reto de mantener la progresión ascendente de un equipo lleno de juventud (los jugadores más veteranos, Mike Bibby y Speedy Claxton acaban de cumplir la treintena y el resto no supera los 27) y para ello tendrá que tomar en los próximos meses importantes decisiones, empezando por la continuidad o no del actual entrenador, Mike Woodson.

Larga trayectoria en los despachos

Rick Sund es todo un veterano en las labores directivas y un hombre muy respetado dentro de la liga. En su época universitaria fue un destacado jugador de fútbol americano y baloncesto en la universidad de Northwestern. Sobresalió especialmente en su desempeño como base dentro del equipo de básquet de la mencionada universidad ubicada en el estado de Illinois y que milita en la potente ‘Big Ten’ (junto a universidades como Indiana, Michigan, Ohio State o Purdue entre otras) dentro de la división I de la NCAA.

Tras finalizar su etapa universitaria la carrera de Sund derivó hacia los despachos de la NBA en los que ha pasado los últimos 32 años. Ha ocupado distintos puestos en Milwaukee, Dallas (donde estuvo 15 años y llegó a ser Vicepresidente de Operaciones de Baloncesto), Detroit y Seattle. En los Sonics ocupó el cargo de general manager entre los años 2001 y 2007, hasta que el cambio de propiedad en la franquicia provocó su sustitución por Sam Presti.

En declaraciones a los medios locales, Sund se mostró muy ilusionado con el nuevo proyecto en que se encuentra embarcado: “Lo que tenemos, en cualquier caso, es un tremendo potencial de crecimiento. Acie Law no ha alcanzado todo su potencial de crecimiento. Al Horford no ha alcanzado todo su potencial de crecimiento. Josh Smith, Josh Childress y Marvin Williams, ninguno de ellos ha alcanzado todavía su máximo desarrollo. Y esto es un aliciente importante.”. Y es que el equipo de Atlanta es uno de los más jóvenes de la NBA.

La continuidad de Woodson y la renovación de los ‘Joshes’

El nuevo general manager va a tener que tomar el pulso al equipo de forma rápida ya que en las próximas semanas tiene que tomar dos decisiones muy importantes de cara al futuro del equipo: la continuidad del actual entrenador, Mike Woodson, y la renovación de dos jugadores fundamentales, Josh Smith y Josh Childress, que llegan al verano como agentes libres restringidos.

En cuanto a la continuidad de Woodson, que acaba su contrato el próximo 30 de Junio, todo son especulaciones en el entorno de la franquicia de Georgia, aunque el propio técnico se mostraba confiado en alcanzar un acuerdo para su renovación tras sus primeras conversaciones con Sund. “En resumidas cuentas, y mi postura ha sido siempre ésa, si nuestro equipo ha mejorado y nuestros jugadores respetan lo que mis ayudantes y yo hemos hecho, entonces merecemos seguir aquí”, declaraba Woodson al diario local Atlanta Journal-Constitution en días pasados.

Respecto a la continuidad de Josh Smith y Josh Childress, a quienes el mismo diario situaba en la lista de los cinco agentes libres restringidos más codiciados (junto a Luol Deng, Monta Ellis y el base español José Manuel Calderón), el interés por su renovación es máximo en la franquicia, pero no será fácil retenerlos y al tiempo mantener el equilibrio salarial y financiero de una franquicia modesta como es la de Atlanta. La habilidad negociadora de Sund se pondrá a prueba a partir del 1 de julio, cuando se abre el mercado de los agentes libres.