El resultado no acompañó, Suns perdió en casa 110-118 ante Thunder, pero este domingo 3 de marzo será un día inolvidable para Jusuf Nurkic, ya que su actuación entró a formar parte de la historia de la franquicia de los Suns.
Ese valor histórico de su actuación radicó en que batió el récord de rebotes en un partido de Suns. Capturó nada menos que 31, de los que 13 fueron ofensivos. Un récord que se veía venir cuando el turco ya había capturado 12 rebotes en los 7 minutos que disputó en el primer cuarto.
El récord de la franquicia estaba en poder de Tyson Chandler con 27. Logrado en enero de 2016. Por lo tanto, Nurkic lo batió de forma clara, convirtiéndose en el primer jugador de la franquicia que llega a la barrera de los 30.
Estos 31 rebotes suponen la mayor marca registrada en la NBA en los últimos 14 años.
El mejor registro reboteador de Nurkic en la liga era de 23 capturas cuando jugaba en Portland, pero este año ya había hecho dos partidos de 22 rebotes ante Lakers y Nets.
Nurkic, que es el séptimo reboteador NBA en la presente temporada, superó con holgura la mejor marca reboteadora del curso, que estaba en poder de Andre Drummond y Domantas Sabonis con 26 rechaces.