Estos Celtics son un rodillo. Su quinteto titular de gala es una auténtica apisonadora, una máquina que convierte en papilla a los rivales con una facilidad pasmosa. Dallas aguantó en la primera parte defendiendo mal, pero en la segunda perdió pie de mala manera a causa de su pésimo desempeño defensivo.
Victoria contundente: 138-110. Con una ofensiva impecable e implacable y un trabajo defensivo de muy buen nivel en muchas fases del juego, con excelentes cambios de asignación que fueron fundiendo a unos Mavericks que en el cuarto final se hundieron de un modo definitivo sin que valiera otro gran partido ofensivo de Luka Doncic.
Boston se pone con 47-12 en la clasificación, inalcanzable para cualquier equipo esta temporada, suma un gran 28-3 en el TD Garden y logra, con el de esta noche, su décimo triunfo consecutivo.
El ataque local fue un primor, con 138 puntos, 21 triples anotados con una eficacia de prácticamente el 50%, un 55,3% en el tiro de campo, un 100% en libres, 7 jugadores en dobles figuras anotadoras y 3 de ellos por encima de los 20 puntos.
Jayson Tatum se quedó en 2 puntos en el primer cuarto y no anotó su primera canasta en juego hasta mediado el segundo cuarto, pero a partir de ahí se encendió hasta convertirse en el máximo anotador local con 32 puntos. Es el 22º partido de Tatum esta temporada con 30 o más puntos.
Jaylen Brown sumó 25 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias y Kristaps Porzingis añadió 24 tras un gran primer cuarto.
Trabajaron muy bien en la pista Jrue Holiday y Derrick White, y ejerció de modélico sexto hombre un Al Horford intenso que dejó algunas jugadas para el recuerdo, como los 2 taponazos que puso. El dominicano acabó con 12 puntos, 8 rebotes y 3 asistencias, además de esos 2 tapones, jugando 28 minutos. Estuvo brillante en defensa.
Dallas estuvo muy mal desde el triple y ofreció una muy mala imagen en defensa, con una falta de concentración alarmante en ocasiones.
Doncic firmó un triple-doble con 37 puntos, 12 rebotes y 11 asistencias, además de un 14 de 25 en campo.
Kyrie Irving, que jugó a rachas y estuvo desafortunado en el tiro, sumó 19 puntos entre abucheos constantes del público, que no le perdona su poco afortunado paso por Boston en las dos campañas que jugó para los Celtics. Cuando el partido ya estaba decidido, buena parte de la grada la emprendió a cánticos contra él.
En el lado positivo de estos Mavs, los 17 puntos y 7 rebotes de P.J. Washington y los 15 puntos del novato Dereck Lively II, que estuvo perfecto de cara al aro con un 7 de 7.
El visitante Dante Exum volvió de su lesión tras estar más de un mes de baja.
A pesar del 38-32 del primer cuarto y de que Tatum solo llevaba 2 puntos, algo hacía pensar que Boston estaba trabajando bien atrás. En los primeros 12 minutos Dallas solo sumó 2 asistencias y su ataque se movió solamente a impulsos individuales de Doncic.
Ya en el inicio del segundo acto los locales tomaron 12 puntos de ventaja a partir de apretar en defensa, pero Luka Doncic se empeñó, con acierto, en involucrar en el juego a sus compañeros y con la ayuda de un activo Lively II Dallas se acercó, aunque fue un espejismo, porque Celtics nunca perdió el dominio del marcador: 66-59 al descanso.
A partir del tercer cuarto se empezó a desmoronar el castillo de naipes texano, no sin antes ofrecer un auténtico canto del cisne cuando los Mavs se llegaron a poner a 2 puntos (79-77), con Kyrie Irving, P.J. Washington y Dereck Lively II secundando muy bien el juego generoso de Doncic, pero otra vez pisó el acelerador el equipo local hasta ponerse con 14 de ventaja.
El último cuarto fue la debacle definitiva de los Mavericks. Un triple de Payton Pritchard rompió la barrera de los 20 de ventaja (117-96) y a partir de ahí todo fue a peor para los visitantes. Un triple de Horford, el que puso el 127-103 a 3:55 del final, supuso el final de las hostilidades, con los quintetos titulares replegándose en ese momento hasta los banquillos.
No fue rival Dallas para unos Celtics que siguen sin presentar fisuras en la temporada.