Superlativo estreno de Damian Lillard con Milwaukee Bucks. En su primer partido oficial con un equipo que no es Portland, Lillard se ha marcado un partidazo para liderar la apurada victoria de su equipo ante los Sixers (118-117).
Lillard se fue al descanso con 21 puntos tras protagonizar un excelente segundo cuarto, bajó el ritmo en la segunda parte, pero llegada la recta final del partido explotó con su mejor versión, una versión que le dio para anotar 14 puntos en los últimos 4 minutos del partido, siendo suyos 14 de los últimos 16 puntos que metió en el encuentro Milwaukee.
Esa capacidad resolutiva le dio el triunfo a los suyos y a Lillard le otorgó un récord de su nueva franquicia en el primer partido con la elástica de Milwaukee, ya que nadie había metido tantos puntos, 39, en un debut con Bucks. El récord estaba en posesión del gran Terry Cummings, que se estrenó con Bucks en 1984 anotando 34 puntos.
No fue este el único récord histórico que se batió en Bucks esta noche, ya que Giannis Antetokounmpo se convirtió en el jugador que más canasta de campo ha anotado para Milwaukee. Suma ya 5.905, superando las 5.902 que tenía como récord Kareem Abdul-Jabbar desde 1975.
Regresando a Lillard, sus números hablan por sí solos: 39 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias, 0 pérdidas de balón y 17 de 17 en libres, además de decidir el encuentro con su exhibición final.
Antetokounmpo, que no tuvo su mejor día, hizo 23 puntos y 13 rebotes, pero con 7 pérdidas, mientras que Khris Middleton solo disputó 16 minutos, siendo mayor de lo esperada su limitación de tiempo en pista, que ya se había conocido antes del partido.
Los Sixers aguantaron muy bien el tirón a pesar de jugar sin James Harden y a pesar de que en el segundo cuarto ya perdían por 19 puntos (57-38) en lo que parecía que iba a ser una noche nefasta para el equipo. Pero luego se rehicieron. Se fueron al descanso perdiendo 63-54, alcanzaron el final del tercer cuarto muy cerca de su rival, 88-85, y jugándose el último cuarto llegaron a estar 8 arriba. Y gran parte de 'culpa' de que funcionara tan bien el equipo la tuvieron Tyrese Maxey y Kelly Oubre Jr.
Hasta 4 jugadores visitantes anotaron 20 o más puntos. Maxey se fue a 31 puntos y 8 asistencias, sin perder un solo balón, y Oubre Jr. debutó con los Sixers a lo grande, con 27 puntos partiendo de la suplencia, y unos porcentajes de tiro de ensueño.
Joel Embiid sumó 24 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias, aunque extravió 7 bolas, y Tobias Harris fue un maestro de la efectividad. Apenas tocó bola, pero cuando lo hizo resultó letal, con 20 puntos, 7 rebotes y un 8 de 9 en el tiro.
El partido nos dejó los debuts en los banquillos del local Adrian Griffin, que dirigió su primer partido como entrenador jefe en la NBA, y del visitante Nick Nurse, que llevó las riendas por primera vez de los Sixers, dándose la circunstancia de que el primero fue ayudante del segundo en los Raptors.
El cuarto final resultó trepidante. Sixers llegó a ponerse con ventaja de 8 puntos (94-102), pero ahí reaccionó Bucks con parcial de 16-2 para situarse 110-104 en plena arrancada festiva de Lillard en ataque. Ambos equipos se mostraron muy acertados de cara al aro en los momentos decisivos y Lillard resolvió anotando 2 libres para el 118-114 con 11,5 segundos por jugar. Era el colofón a un gran debut por parte del ex de los Blazers, que vivió una noche feliz.