Sixers sacó a relucir su mejor perfil de juego en la recta final del partido tras una primera parte horrorosa en la que Joel Embiid se mostró errático hasta decir basta. Un muy buen final de partido le bastó a Philadelphia para doblegar a los Grizzlies.
Victoria local por estrecho margen, 110-105, gracias a cerrar el partido con parcial de 24-8.
El equipo de Doc Rivers perdía 86-97 a 6 minutos del final, pero supo agarrarse a la pista. Un triple de Tobias Harris a 39 segundos del final adelantó a los locales 106-105. Acto seguido falló Ja Morant, muy mal partido de la estrella visitante, y Embiid puso a los suyos en la senda del triunfo con un mate.
Sixers sobrevivió a su penosa primera parte, una primera mitad en la que perdió 47-59 tras meter un 31,3% de sus tiros de campo con Embiid en una serie de 2 de 14 en el lanzamiento a canasta.
Acabó ganando Philadelphia con 31 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias y 6 de 9 desde el triple de un firme y seguro James Harden. Embiid no estuvo bien en el tiro pero firmó 27 puntos, 19 rebotes, 6 asistencias y 6 tapones y Harris añadió 20 puntos, con Tyrese Maxey añadiendo 16 a pesar de su desacierto de cara al aro.
Problemas de faltas para De'Anthony Melton, que apenas pudo jugar 13 minutos.
Memphis se vino abajo tras el descanso (63-46), mostrándose especialmente frágil en el último cuarto.
No fue el día de Ja Morant (15 puntos con 3 de 16 en el tiro), Brandon Clarke se cargó de faltas y Desmond Bane bajó sus prestaciones tras un fantástico primer tiempo, acabando el partido con 25 puntos y 8 rebotes.
Jaren Jackson Jr. firmó 18 puntos, 9 rebotes y 4 tapones, pero con 5 de 16 en el tiro tras fallar casi todos sus intentos triples. Y el español Santi Aldama acabó con 6 puntos en 15 minutos tras cometer 5 faltas.