Las lesiones se ceban con Zach Collins, un jugador muy golpeado en su físico en su todavía corta carrera NBA. Esta vez la lesión se localiza en la pierna izquierda, donde sufre una fractura sin desplazamiento en la tibia.
El jugador de los Spurs se lesionó el 4 de noviembre ante los Clippers, aunque no fue hasta que se hizo una resonancia magnética cuando se descubrió el alcance real de la lesión.
San Antonio no ha facilitado un tiempo de rehabilitación, pero se da por hecho que en ningún caso bajará del mes, si bien algunos jugadores que sufrieron una lesión similar con antetioridad tardaron en recuperarse más tiempo, en torno a las 7 semanas.
La trayectoria profesional de Collins ha estado lastrada por las lesiones. Solo jugó 11 partidos en la temporada 2019-2020, se quedó completamente en blanco en la 2020-2021 y el pasado curso tan solo disputó 28.
Esta temporada llevaba jugados 9 encuentros con Spurs en los que estaba promediando 8,3 puntos, 4,7 rebotes y 1,2 tapones.