Golden State Warriors ha acordado las extensiones de contrato de dos de sus jugadores clave, Andrew Wiggins y Jordan Poole. En ambos casos las prolongaciones de contrato son por 4 años y alcanzan hasta 2027.
Wiggins ha acordado una extensión de 109 millones de dólares por 4 años que empezará en el curso 2023-2024, tras percibir en su último año del actual contrato (curso 2022-2023) un salario de 33,6 millones de dólares.
El último año de la extensión, 2026-2027, será opción de jugador.
El alero de 27 años, número 1 del draft de 2014, lleva en el equipo 2 temporadas y media, promediando en la última 17,2 puntos y 4,5 rebotes en 73 partidos, todos como titular, en los que encestó el 39,3% de sus tiros de 3.
Además, el equipo de San Francisco ha cerrado la prolongación de contrato de Jordan Poole, que asciende a 123 millones de dólares por 4 años que podrían llegar a los 140 millones de dólares si se cumplen una serie de incentivos.
Poole, de 23 años, percibirá esta temporada 3,9 millones y su extensión arrancará en la campaña 2023-2024 para llegar hasta 2027.
El escolta, que viene de vivir un penoso incidente con su compañero Draymond Green, lleva 3 temporadas en Warriors y siempre ha ido a más, firmando en la última cifras de 18,5 puntos, 3,4 rebotes y 4 asistencias en 76 encuentros, y terminando la campaña como mejor lanzador de la liga en tiros libres con un 92,5% de acierto.
Con estos acuerdos, Warriors consigue mantener en cartera a todo su núcleo central de jugadores campeones, pero elevando su gasto para la temporada 2023-2024 hasta unos increíbles 483 millones de dólares entre salarios y penalizaciones por el impuesto de lujo.