Golden State Warriors parece tenerlo claro: James Wiseman es intocable. El joven jugador no va a ser incluido en ningún traspaso porque la franquicia tiene plena confianza en él y considera que terminará convirtiéndose en una estrella.
La información es de The Athletic, cuyas fuentes son inequívocas en esa confianza plena que el club tiene depositada en el jugador.
Wiseman fue una apuesta indudable de Golden State cuando lo seleccionó en el segundo puesto del draft de 2020, pero su primer año como profesional no fue especialmente convincente y se acabó antes de tiempo por un desgarro en el menisco de la rodilla derecha que le tiene ya sin jugar 8 meses.
El regreso del jugador a las pistas se acerca, aunque no llegará hasta 2022, según reveló recientemente su entrenador, Steve Kerr, y la gran pregunta que se hacen muchos es cómo este joven talento se acoplará a un equipo que, hoy por hoy, es una máquina bien engrasada que presenta la mejor marca de toda la NBA.
El ex de Memphis, de 20 años, solo pudo jugar 39 partidos como rookie en los que promedió 11,5 puntos y 5,8 rebotes, con un 51,9% en el tiro de campo, y esta temporada todavía no se ha podido vestir de corto en competición, sin que hasta la fecha haya podido ni siquiera entrenar todavía con normalidad con el resto de sus compañeros.
Warriors está ahora mismo sin Klay Thompson, James Wiseman y Andre Iguodala, a pesar de lo cual lidera la liga con 21 victorias en 25 partidos.