Tilman Fertitta es un propietario feliz. Nada empaña el buen momento que parece sentir el dueño de Houston Rockets a pesar de que su club va a terminar la temporada como el peor equipo de la NBA.
Houston está solo con 16 victorias (16-53) y acumula 4 derrotas más que su antecesor en la liga cuando solo restan 3 partidos, lo que asegura a Rockets el puesto de farolillo rojo al final de la competición, pero a pesar de ello a Fertitta no se le quita la sonrisa de los labios.
Las declaraciones que el magnate ha ofrecido a ESPN no tienen desperdicio: "Nunca pensé que podría sentirme tan bien después de ganar solo 16 partidos", ha asegurado.
Fertitta mira el futuro con tremendo optimismo. "Cuando miro todas las elecciones de draft que tenemos y pienso en el futuro, me siento feliz", ha declarado.
El propietario de la franquicia texana se muestra muy satisfecho con el trabajo que han desarrollado hasta la fecha el entrenador, Stephen Silas, y el general manager, Rafael Stone, dos profesionales que están debutando con Rockets sin haber acumulado ningún tipo de experiencia anteriormente en dichos cargos.
La de Rockets está siendo una temporada de locos. Antes de empezar la temporada la franquicia perdió a sus 'eternos' entrenador, Mike D'Antoni, y general manager, Daryl Morey. También había desaparecido de su plantel Russell Westbrook, mientras que James Harden, descontento con la situación, pidió el traspaso y solo jugó en el presente curso 8 partidos con Houston.
El equipo adquirió esta temporada jugadores de gran calidad cuyas trayectorias se truncaron en su día por graves lesiones. Llegó John Wall para quedarse y tuvieron pasajes efímeros por el club DeMarcus Cousins y Victor Oladipo.
También se marcharon más jugadores clave en la etapa pasada, jugadores como Rovert Covington o P.J. Tucker. Y el equipo se quedó con un núcleo joven por madurar integrado por jugadores como Kevin Porter Jr., Kenyon Martin Jr. o Jae'Sean Tate, además de ver cómo progresaba en su primera oportunidad como titular el pívot Christian Wood.
La temporada ha resultado caótica. ¡Los Rockets han puesto en juego a lo largo de la campaña a 29 jugadores! Sí, ¡29 jugadores! Y sus partidos han sido una constante oda al fracaso y la derrota. Pero todo este panorama no ha hecho mella en el que pone la plata. Parece que Fertitta está muy cómodo en medio de la reconstrucción extrema en la que está embarcada su franquicia.