Se le puede tachar de inmaduro, temperamental y díscolo, se le puede criticar su forma de comportarse fuera de la cancha, pero nadie puede dudar de la inmensa calidad deportiva de Kevin Porter Jr. Hoy, Milwaukee Bucks la ha sufrido en sus carnes con la mayor de las crudezas.
Inmensa actuación del joven jugador de Houston Rockets para liderar una sorprendente victoria del peor equipo de la temporada ante uno de los más potentes del curso. ¡Houston ha ganado 143-136 a Milwaukee y Porter Jr., de 20 años, se ha convertido en el cuarto jugador más joven en alcanzar los 50 puntos en un partido en la historia de la NBA!
Lo de Porter Jr. hoy ha sido para enmarcar. Memorable su desempeño en la cancha, absolutamente arrebatador por momentos. Sus números hablan por sí solos: ¡50 puntos, 11 asistencias, 9 triples con un 60% de acierto, 16 de 26 en el tiro de campo y un +19 de su equipo con él en acción!
Porter Jr. ha anotado 32 puntos en la segunda parte y 17 en el cuarto final. Alucinante partido el de este jugador de segundo año que ante los Bucks ha explotado en la pista esparciendo todo su talento, que es mucho.
El partido quedó mediatizado por su primer minuto de juego y tuvo su punto de inflexión en el tercer cuarto.
En ese primer minuto de juego se lesionó Giannis Antetokounmpo en una jugada fortuita con Kelly Olynyk. Esguince de tobillo para el griego, que solo pudo jugar 46 segundos.
A pesar de la lesión, los Bucks dominaron el partido en la primera parte, tal y como cabía esperar en cumplimiento de la lógica, y hasta llegaron a gozar de una ventaja de 17 puntos (52-69) a falta de 3:18 para el descanso. Pero ahí llegó el primer momento en el que los favoritos flaquearon, tal vez como producto de la relajación de ir ya ganando por 17 a un equipo como los Rockets.
Houston hizo un poderoso final de primer tiempo con parcial de 13-4 que incluyó 3 triples en el último minuto y se plantó en el descanso perdiendo 65-73 en un partido sin defensas en el que el tremendo acierto desde el triple del equipo local terminaría resultando decisivo.
El tercer cuarto fue la clave del juego. Allí, Houston fue capaz de darle la vuelta al encuentro y meter en serios problemas a los Bucks, que no fueron los mismos en la segunda parte (78-63) que en la primera. Desastrosa defensa del equipo de Budenholzer, al borde de encajar 80 puntos en la segunda mitad.
Rockets no se amilanó, no bajó la guardia, no entregó el partido en ningún momento, se envalentonó y terminó ganando 143-136 en un partido entregado en cuerpo y alma a la ofensiva y carente del más mínimo rigor defensivo.
Acompañaron la exhibición de Porter Jr. jugadores como Christian Wood (31 puntos, 9 rebotes y 6 triples) y Kelly Olynyk (24 puntos y 13 rebotes). D.J. Wilson logró 15 tantos y 12 rebotes desde la segunda unidad, y la rana (Houston) se convirtió en príncipe por una noche.
Tremenda la ofensiva local con 25 triples anotados con un 54,3% de acierto. Houston metió el 50% de sus tiros de campo lanzando 98, dominó el rebote (capturó 16 ofensivos) y sobrevivió a sus 18 balones perdidos.
Jornada para olvidar de los Bucks. Derrota inesperada ante Rockets y lesión de Anteto, un combo difícil de superar.
De nada sirvieron las brillantes ofensivas de Khris Middleton (33 puntos y 8 asistencias), el suplente Bryn Forbes (30 puntos y 6 triples) y Jrue Holiday (29 puntos, 10 asistencias y nada menos que 4 tapones).
Estaba claro que no era el día de Milwaukee Bucks y que sí lo era de Kevin Porter Jr. y sus Rockets.