La estancia de Austin Rivers en Oklahoma City Thunder ha sido tan fugaz como se esperaba. El jugador llegó al equipo el pasado 25 de marzo en pleno deadline a través de un acuerdo a tres bandas que llevó a George Hill a los Sixers.
Cuatro días después el jugador ha sido cortado, según ha comunicado de forma oficial su club.
Thunder está en pleno proceso de reconstrucción, un proceso en el que planea sin tapujos apostar por el desarrollo de sus jóvenes jugadores y prescindir de todos aquellos integrantes que tienen ya una larga experiencia NBA, un plan que aboca al equipo a perder partidos y más partidos en busca de posicionarse bien de cara al próximo draft.
En esa filosofía del equipo, que antes de que comenzara esta temporada desmanteló su plantilla, no tiene cabida Al Horford, que no volverá a jugar en lo que resta de temporada, y tampoco la tenía Austin Rivers, que ha sido despedido y que tendrá que buscar acomodo en otro equipo.
Rivers, de 28 años, está en su novena temporada NBA tras ser la décima elección del draft de 2012.
Esta temporada ha disputado 21 partidos con los Knicks, equipo con el que promedió 7,3 puntos y 2 asistencias antes de ser traspasado.