Llega el momento de asegurar los contratos no garantizados o desprenderse de los jugadores para no garantizar los acuerdos. Este miércoles termina el plazo de garantía salarial y habrá más de un descarte. Nos ocupamos de tres cortes recién cerrados.
El primero ya había sido avanzado por activa y por pasiva, pero es ahora cuando se ha hecho efectivo. Se trata de la salida de DeMarcus Cousins de Houston Rockets. La suya es una situación distinta a la del resto, ya que en este caso Houston garantizó el contrato del jugador hasta el final de la temporada (2,3 millones de dólares) la semana pasada sin que ello se opusiera a la idea de que Rockets y Cousins separaran sus caminos.
Cousins ha jugado 25 partidos con los Rockets, 11 como titular, y se ha permitido el lujo de compartir vestuario con su excompañero universitario y amigo John Wall. Ha promediado 9,6 puntos y 7,6 rebotes en 20,2 minutos.
Está muy lejos el físico de Cousins al que tenía previamente a sus graves lesiones, pero es un jugador interesante en el mercado. Tendrá pretendientes cuando salga de la lista de cortados.
Cook y Thornwell, sin equipo
Lakers, mientras, se ha desprendido del base Quinn Cook, jugador de 27 años que atesora ya dos anillos de campeón. El ex de Warriors apenas tenía cabida en la rotación de Frank Vogel.
Con la salida de Cook, Lakers queda con un par de puestos vacantes en su plantilla.
Se espera que varios equipos busquen la contratación del jugador cortado.
Otro jugador que se ha quedado sin equipo es el escolta Sindarius Thornwell, despedido por los Pelicans.
Thornwell apenas había jugado 11 partidos esta temporada con una media de 4,8 minutos de juego.
Con este movimiento los Pelicans obtienen un puesto vacante en su plantel y quedan ligeramente por debajo del límite que obliga a abonar el impuesto de lujo.