Miami Heat y San Antonio Spurs tienen de regreso al juego a dos jugadores importantes para sus esquemas de juego, Jimmy Butler y Derrick White. Los dos se habían perdido un buen número de partidos en el mes de enero.
Butler había estado 3 semanas sin jugar, tiempo en el que no había disputado 10 partidos. Su baja se debió a la pandemia, ya que entró en los protocolos de salud y seguridad de la NBA.
Su regreso no ha podido ser más feliz, porque ha tenido de todo, y todo positivo. Su equipo ha ganado 105-104 a Sacramento Kings con él como gran estrella del partido tras hacer 30 puntos (mejor marca personal de la temporada), 7 rebotes y 8 asistencias sin pérdida alguna de balón. Ha estado 34 minutos en pista y ha ido 16 veces a la línea de libres.
Para completar su gran jornada, Butler ha alcanzado dos cifras redondas en su carrera NBA: los 10.000 puntos y los 3.000 rebotes. Ambas cifras las alcanzó cuando se jugaba la primera parte. Llega a ellas con 31 años y 588 partidos de temporada regular a sus espaldas.
No le fue tan bien en el plano colectivo a Derrick White, aunque su actuación personal fue bastante buena. Spurs perdió 112-129 contra Memphis Grizzlies. White fue suplente, solo disputó 22 minutos, pero en ese tiempo fue capaz de hacer 18 puntos, 2 rebotes y 2 robos de balón, además de 3 triples.
El escolta, de 26 años, llevaba prácticamente un mes fuera de juego por una lesión que le ha hecho perderse 14 partidos. Este ha sido su segundo encuentro en la presente temporada.