Gordon Hayward empieza a silenciar un poco a sus detractores. El alero firmó un contratazo impensable con los Hornets y comienza a rendir acorde a ese contrato. Nuevo partidazo del ex de Jazz y Celtics para liderar la cuarta victoria consecutiva de su equipo.
Triunfo por 109-88 ante unos Knicks que poco a poco se van defondando tras empezar de forma sorprendentemente feliz la temporada.
El partido se rompió en el tercer cuarto, cuando Hornets fue capaz de escaparse en el marcador para conseguir a su final un +14 (82-68).
La primera parte había acabado 57-50 merced a una poderosa exhibición de Hayward. ¡El alero metió 28 puntos en la primera mitad con porcentajes de tiro excelsos!
Su segunda mitad nada tuvo que ver, pero a Hayward le dio para terminar el partido con 34 puntos. Su media en la temporada es de 22,5 puntos en 11 encuentros, pero ese promedio anotador se ha disparado en los últimos partidos, en los que más exitosos están siendo para su equipo. Y ahora Hornets se pone con marca positiva en la clasificación: 6 victorias y 5 derrotas.
Charlotte ha contado además con 19 puntos de Devonte Graham y con una noche irregular del novato LaMelo Ball, que ha estado realmente mal en el tiro (3 de 13), pero que ha sido capaz de aportar sobremanera en otras facetas del juego, acabando el encuentro con 8 puntos, 14 rebotes y 7 asistencias.
Excelente trabajo defensivo de Hornets durante todo el partido y dominio incontestable en el luminoso a pesar de ceder demasiados rebotes en su propio aro.
Los Knicks, mal. Por debajo del 40% en el tiro, anotando solo 9 triples, sin gasolina en el ataque durante todo el partido.
El equipo neoyorquino tuvo a un Julius Randle desconocido, muy alejado del gran Randle que se está viendo esta temporada, y a un Barrett en 5 de 18 en el tiro.
Kevin Knox fue su máximo anotador con 19 puntos, Mitchell Robinson rubricó un doble-doble y Austin Rivers firmó su primera titularidad cubriendo la baja del ausente Bullock.