La vida deportiva de Jonathan Isaac gira alrededor de las rodillas. En la burbuja de Orlando se hizo célebre su gesto de no arrodillarse cuando sonó el himno nacional de Estados Unidos y poco después vuelve a ser noticia porque la rodilla izquierda le ha vuelto a fallar.
Las primeras informaciones indican que el jugador tiene dañado el ligamento cruzado anterior, una lesión ciertamente grave.
Llueve sobre mojado. Isaac sufrió una hiperextensión en la rodilla izquierda en el mes de enero, un esguince que le dejó K.O. durante meses. Su baja se unió a la pandemia y todo se tornó más difícil: la rehabilitación y la posibilidad de unirse a Orlando Magic en la burbuja de Orlando. Pero fue capaz de superar todos los obstáculos.
Su reaparición en la pretemporada fue prometedora tras estar 7 meses sin jugar. Pocos minutos pero máxima productividad. Y su primer partido oficial, en el que no se arrodilló en los prolegómenos, también ofreció una buena lectura con minutos restringidos.
Pero la desgracia estaba por venir. Ha llegado hoy. En el último cuarto del Magic-Kings. Faltaban más de 9 minutos para el final del encuentro cuando Isaac penetró a canasta y se le dobló la rodilla, lo que le hizo dar un respingo en su movimiento y terminar tumbado bajo la canasta.
Se podían apreciar los tremendos gestos de dolor del jugador, que pronto fue socorrido.
Se echaba Isaac la mano a la rodilla izquierda, la misma que le había martirizado en este año 2020. Y tuvo que marcharse del pabellón en silla de ruedas tras haber jugado 15 minutos en los que hizo 4 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias y 2 robos. Otra vez productivo.
Orlando ganó a Sacramento, pero la tristeza era la nota predominante en el equipo, porque todos tenían en mente la nueva desgracia de su compañero.