Los Celtics siguen pendientes de la rodilla izquierda de Kemba Walker. El base entrenó el pasado martes en la burbuja Disney y lo hizo solo parcialmente el jueves. Kemba asegura que su rodilla sigue mejorando y espera estar a tope cuando lleguen los cruces de la postemporada.
El jugador de Boston ha arrastrado problemas en la rodilla desde febrero. Eso no le impidió apurar la temporada hasta el 10 de marzo, fecha del último partido que jugó, si bien su recta final de campaña antes de la cancelación de la competición resultó harto elocuente.
Sin ir más lejos, los 4 partidos que disputó en el mes de marzo se saldaron con una pobre media anotadora de 14,8 puntos tras anotar solo el 31% de sus tiros de campo. Se veía a Walker lejos de su mejor físico.
Kemba ha hablado en la burbuja de Orlando sobre su estado físico. "Era definitivamente dolor. No puedo explicarlo, pero me dolía a un lado de la rodilla. No sé que más puedo decir", ha asegurado.
Walker ha disputado esta temporada 50 partidos con Celtics en los que ha promediado 21,2 puntos en 31,2 minutos.
Su plena recuperación, exenta de dolores, se antoja esencial a la hora de que Boston Celtics pelee de tú a tú por el cetro del Este.