John Wall está plenamente recuperado, pero no volverá al juego esta temporada aunque la NBA consiga que la competición parada por la Covid-19 se reanude. Su objetivo es regresar a las canchas la próxima temporada en plenitud de condiciones.
"Estoy al 110%, estoy sano, estoy impaciente por volver a las pistas", ha asegurado el jugador, que deja su esperado regreso para la próxima campaña, tal y como ya se había avanzado en su día.
Wall lleva un año y medio sin jugar al baloncesto. El 5 veces All-Star jugó su último partido en diciembre de 2019, mes en el que llegó a hacerle a los Lakers 40 puntos y 14 asistencias en un partido memorable.
Luego llegaron las vacas flacas. El talón izquierdo dijo basta tras plantearle problemas crónicos. El 8 de enero pasó por el quirófano para ser intervenido con el fin de solucionar la deformación que tenía en el talón provocada por el síndrome de Haglund.
Pero lo peor vino después. Cuando estaba en pleno proceso de rehabilitación, Wall sufrió una caída en su casa y se rompió el tendón de Aquiles izquierdo, lo que agravó su situación y le obligó a pasar de nuevo por la mesa de operaciones.
Todo esto ha llevado al base a sufrir un parón muy prolongado en plena madurez deportiva, ahora tiene 29 años.
Tras jugar 41 partidos en el curso 2017-2018, solo 32 en la temporada 2018-2019 y quedar en blanco en la presente campaña, el regreso de Wall generará una gran expectativa y muchas dudas.