Si Michael Jordan tenía el sueño de jugar al béisbol, y terminó haciéndolo aunque no debutara en la MLB, LeBron James no le fue a la zaga y siempre albergó el sueño de jugar al fútbol americano al máximo nivel, en la NFL.
Ese sueño estuvo a punto de hacerse realidad en 2011. La NBA estaba parada por el cierre patronal y James se planteó entonces jugar en la NFL, y hacerlo en un equipo de campanillas, Dallas Cowboys.
Lo ha reconocido ahora el jugador de Akron: "No tenía ni idea de cómo iba a ser de largo el parón y mi entrenador Mike y yo intentamos entrenar para que me convirtiera en jugador de fútbol americano".
Aquel intento no fructificó y LeBron siguió vinculado en exclusiva al baloncesto, el deporte que le ha dado reconocimiento mundial y que le ha convertido en una leyenda en activo.
James siempre amó el fútbol americano. Y practicó dicho deporte con éxito en el instituto, brillando como receptor abierto, lo que le valió el recibir diversas ofertas para que jugara en dicho deporte en la NCAA, algo que nunca sucedió (de hecho LeBron ni siquiera pisó la universidad).
"He soñado todo el tiempo con jugar al fútbol americano", reconoce ahora LeBron.
Mientras, el exjugador de la NBA y actual entrenador de Clippers, Doc Rivers, no alberga ninguna duda: LeBron hubiera hecho historia también en la NFL.