Omri Casspi regresa a su país natal, Israel, para jugar de nuevo en Maccabi de Tel Aviv, el equipo que djó hace 10 años para emprender la aventura americana y convertirse en el primer jugador israelí en jugar en la NBA.
Ha sido una década en la NBA en la que el alero ha formado con Kings (en dos etapas), Cavs, Rockets, Pelicans, Timberwolves, Warriors y Grizzlies hasta totalizar 588 partidos de fase regular en los que promedió 7,9 puntos y 4 rebotes, fue 145 veces titular y metió el 37% de sus tiros triples.
El curso pasado jugó en Memphis, equipo con el que abordó 36 partidos metiendo 6,3 puntos por juego.
El único pero en su carrera en Estados Unidos es que nunca pudo acceder a los playoffs tras 10 años de estancia en la liga.
El acuerdo con Maccabi, acuerdo que ya se apuntaba hace un mes, es por 3 temporadas.
De este modo, Casspi, de 31 años, vuelve al equipo al que llegó cuando solo tenía 13 y del que se fue más tarde para ir a la NBA.
Un regreso que colma de alegría al equipo, que también ha fichado al ex NBA Quincy Acy, y que hace que el jugador asegure que está "muy emocionado".