Desbandada en Estados Unidos. Cada día renuncia un jugador más al Mundial de China, una clásica situación cuando la selección estadounidense afronta una cita mundial y no unos Juegos Olímpicos, ese torneo al que todos quieren ir.
Los últimos en borrarse del Mundial son dos jugadores importantes: Damian Lillard (Blazers) y DeMar DeRozan (Spurs), este último pupilo del seleccionador, Gregg Popovich, durante la temporada NBA.
Con estas dos renuncias, ya son 8 las bajas que se han anunciado en los últimos días, bajas lideradas por Anthony Davis y James Harden, y aún está la selección a la espera de que Kevin Love y algún que otro jugador puedan decir no a última hora al Mundial.
Estados Unidos afrontará a partir del 5 de agosto en Las Vegas su preparación para la cita mundialista, el primer torneo que dirigirá Popovich.
USA Basketball ha citado para cubrir ausencias a jugadores como Marcus Smart, D'Angelo Russell, Julius Randle o Jaylen Brown.
Las bajas a la hora de afrontar los campeonatos mundiales son habituales en Estados Unidos. Así sucedió en el Mundial de Turquía de 2010 con respecto a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y tambén en el Mundial de España 2014 respecto a los Juegos Olímpicos de Londres 2012.