Tras el no a los Lakers de Kawhi Leonard, que optó por los vecinos Clippers, los Lakers se han visto obligados a ejecutar su plan B, que, en ausencia de una tercera estrella, supone tratar de rodear de jugadores solventes a LeBron James y Anthony Davis. Llega Danny Green y renuevan Kentavious Caldwell-Pope y JaVale McGee.
Green firmará un contrato por 2 temporadas y 30 millones de dólares para unirse a Lakers. El movimiento lo anunciaba el propio jugador en redes sociales. Otra baja importante para los actuales campeones, los Raptors.
El escolta, con 10 temporadas NBA a sus espaldas y una amplia experiencia en playoffs, supone un refuerzo importante para el equipo angelino. El año pasado, tras superar los problemas físicos sufridos en la campaña anterior, promedió 10,3 puntos en temporada regular con los Raptors, anotando el 45,5% de sus triples.
Caldwell-Pope, por su parte, renueva a la baja, con un contrato de 8 millones anuales por dos temporadas frente a los 12 que percibió la pasada temporada. A sus 26 años, la pasada fue su peor temporada anotadora desde su año de novato, con solo 11,4 puntos por encuentro, pero sigue siendo un jugador que puede aportar mucho en la rotación de los californianos.
En cuanto a McGee, su nuevo contrato es por 2 temporadas y un total de 8,2 millones de dólares. La segunda campaña será opción del jugador. Su misión será ser el respaldo de Davis desde la suplencia. El año pasado promedió 12 puntos y 7,5 rebotes, resurgiendo de unos años oscuros a nivel individual en los que pasó hasta por 4 equipos diferentes y, eso sí, logró 2 anillos con los Warriors.