Los Warriors eliminaron a los Rockets una vez más, y ya van 4 eliminaciones en playoffs de los texanos a manos de los californianos en los últimos 5 años. Se den las circunstancias que se den algo es fijo: Golden State tiene tomada la medida a Houston.
Anoche, más de lo mismo. Los de Steve Kerr afrontaron la serie sin el lesionado DeMarcus Cousins y tuvieron que jugar el sexto partido sin el también lesionado Kevin Durant. No importó, una actuación estelar de Stephen Curry en la segunda parte (0 puntos en la primera y 33 en la segunda) dejó fuera a los de Mike D'Antoni. Al final, 113-118 para el 4-2. Warriors se mete un año más en las Finales del Oeste.
El maleficio cargado de impotencia que protagonizan los Rockets comenzó en la temporada 2014-2015. Ese año ambos equipos alcanzaron las Finales del Oeste, que se resolvieron con un contundente 4-1 a favor del equipo de la Bahía de San Francisco.
Un año después ambos equipos se enfrentaron en la primera ronda de la postemporada y el resultado se repitió: 4-1 para los de California en el adiós de los de Texas.
La campaña 2016-2017 fue una excepción porque las escuadras que nos ocupan no midieron sus fuerzas en playoffs.
Y llegamos a la temporada 2017-2018, la más cruel para los Rockets. Duelo grande en las Finales del Oeste con Houston dominando 3-2 para dejar atrás por fin su pesadilla. Tampoco entonces se cumplió el sueño de los texanos. En el sexto partido, paliza de Warriors por 115-86 y en el séptimo y definitivo... varapalo para Houston jugando en el Toyota Center al perder 92-101 y quedar eliminado 4-3.
Anoche, esta trayectoria de derrotas ante Warriors cumplió un paso más. Derrota por 4-2 y vuelta a la casilla de inicio, como si nada hubiera cambiado en el último lustro.