Nikola Jokic no pudo culminar su hazaña. El tiro libre errado por el serbio a 5,6 segundos del final del partido arruinó una noche inolvidable del pívot europeo, que vio cómo su equipo, Denver Nuggets, perdía ante Portland tras 4 prórrogas por 140-137.
Partido récord. Segunda vez en la historia de la NBA que se juegan 4 prórrogas en un encuentro de playoff. Récord de duración que iguala lo ocurrido en 1953 entre Boston Celtics y Syracuse Nationals.
Jokic, un tipo alto y corpulento que no necesita ser veloz para marcar la diferencia, jugó la friolera de 65 minutos, quedándose a 2 minutos de igualar el récord de tiempo en cancha en un partido de postemporada en la historia de la liga. Jugó, en realidad, el tiempo de dos partidos en uno solo.
En ese tiempo, el serbio firmó su tercer triple-doble en los 10 partidos de playoffs que lleva disputados este año.
Logró 33 puntos, 18 rebotes y 14 asistencias superando el 50% en el tiro de campo y metiendo 4 triples. Eso sí, perdió 8 balones, algo lógico teniendo en cuenta todo el balón que absorbió y cómo dirigió con maestría a su equipo en un partido de 68 minutos en los que solo descansó 3.
La gran estrella de Denver promedia en la presente postemporada 24,8 puntos, 12,6 rebotes y 9,1 asistencias en 10 partidos con excelentes porcentajes de campo, triple y libres. Se está consagrando como un jugador excepcional.
Ahora tendrá que tirar de sus compañeros para remontar la serie ante Portland, aunque habrá que ver cómo ha quedado su físico tras el maratoniano partido de hoy.