Kawhi Leonard robó el protagonismo a DeMar DeRozan en el emotivo regreso de este a Toronto, su casa de siempre. Se lo robó en la parte final, en los momentos cruciales. Además, literalmente: robándole un balón importantísimo.
Un triple de Marco Belinelli había adelantado a San Antonio 115-117 entrados ya en el último minuto, pero luego vino un tiro libre de Serge Ibaka y la reacción triunfal de Leonard. Primero con un robo a DeRozan para hacer un mate y poner el 118-117. Falló Davis Bertans y Leonard remató el partido con 2 tiros libres para el definitivo 120-117.
Antes de ese desenlace, DeRozan fue el protagonista absoluto. Porque jugaba por primera vez en Toronto como visitante tras el traspaso que le envío a los Spurs a cambio de que, el decisivo anoche, Kawhi Leonard recalara en los Raptors.
El recibimiento no pudo ser más caluroso. Hubo mucho cariño en la grada hacia su exjugador. Aplausos en el calentamiento, ovación en las presentaciones, calor humano tras proyectarse un vídeo-tributo en el primer tiempo muerto del partido... todo fue maravilloso para DeRozan, salvo ese final que supuso la derrota de su equipo.
Los intercambiados lideraron las anotaciones de sus nuevos equipos. Leonard acabó con 25 puntos (19 en la segunda parte) y DeRozan hizo 23 más 8 asistencias.
Nada que ver ese brillo del dúo estelar con la noche que vivieron los hermanos Gasol. Marc Gasol solo pudo jugar 17 minutos por culpa de las faltas. Disputó 6 en la primera parte tras hacer 3 y acabó el partido con 5 personales para sumar 4 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias. Pau Gasol ni siquiera entró en la rotación de Gregg Popovich, una vez más.
Toronto (con marca ya de 44-16) tuvo a Pascal Siakam en 22 puntos, a Kyle Lowry (bello abrazo con DeRozan) y Danny Green con 17 puntos cada uno y a Serge Ibaka con 13 tantos y 15 rebotes en 31 minutos de juego. Jeremy Lin estuvo bien en los 19 minutos que ocupó la cancha.
San Antonio jugó de inicio con un equipo muy bajo y sufrió durante todo el partido la horrible noche de LaMarcus Aldridge, que notó el poderío defensivo del juego interior local y solo metió 6 puntos.
Lo mejor de los texanos estuvo en su suplencia. La segunda unidad anotó 60 puntos con Belinelli al frente (21 tantos y 5 triples). También brillaron Patty Mills y Davis Bertans.