El asunto no es nuevo: LeBron James quiere ser en el futuro propietario de una franquicia. Ahora, insiste sobre ello en un amplio artículo Brian Windhorst, en ESPN. El deseo de LeBron es seguir los pasos de Michael Jordan.
Jordan es el único exjugador que es propietario mayoritario de una franquicia en la NBA, Charlotte Hornets, que este fin de semana será la anfitriona del All-Star.
Hay otros jugadores que han sido o son accionistas minoritarios en clubes de la NBA, tales como Magic Johnson (Lakers), que sí es propietario de una franquicia deportiva en la actualidad -Los Angeles Dodgers-, Grant Hill (Hawks), Shaquille O'Neal (Kings) y Elliot Perry (Grizzlies).
Lo habitual es que los jugadores retirados se reubiquen en la NBA en otros puestos, tales como entrenadores, altos ejecutivos (presidente, general manager...), asesores, analistas en medios de comunicación... lo de Michael Jordan es una excepción, pero es que su fortuna al dejar el baloncesto era excepcional.
Jordan compró los entonces Bobcats por 275 millones de dólares, pero solo tuvo que abonar en efectivo 30 millones, según una información del Charlotte Observer, un 'modus operandi' que reconoce Windhorst que ahora mismo sería imposible seguir en la NBA para comprar una franquicia.
La leyenda del baloncesto heredó también, claro está, las deudas de los Bobcats (ahora Hornets) y fue adquiriendo poco a poco más acciones hasta poseer actualmente el 90% del accionariado del equipo, cuyo 100% tiene un valor estimado ahora mismo de 1.200 millones de dólares, según Forbes.
Los pasos de LeBron
LeBron no es un jugador al uso ni dentro ni fuera de la cancha, donde se ha movido de forma exitosa en el mundo de los negocios, incluidos los que le vinculan a la industria del entretenimiento, que ya está potenciando tras su llegada a Los Ángeles, la meca de dicha industria.
La fortuna de James ahora mismo, según Forbes, rondaría los 440 millones de dólares, procedentes fundamentalmente de sus salarios, de su megacontrato con Nike y de su relación también con Coca Cola, aunque sus fuentes de ingresos son muy amplias.
Su idea es hacerse propietario de una franquicia en el futuro junto a su socio Maverick Carter, aunque la operación precisaría de más socios encabezados, eso sí, por LeBron.
James ya es accionista minoritario en la actualidad de uno de los grandes equipos ingleses de fútbol, el Liverpool, y en el futuro podría intentar ser propietario de una franquicia deportiva o de equipos de e-sports. Esa franquicia sería preferentemente una franquicia de la NBA, pero no se descartan otros deportes ni otras latitudes que nada tengan que ver con Estados Unidos.