Se prometía un encuentro equilibrado. Pero no hubo partido. Portland hizo un primer cuarto excelso. Y aniquiló a los Jazz. Con C.J. McCollum como maestro de ceremonias. A partir de ahí, Utah nunca tuvo capacidad de remontada.
El primer cuarto resultó delirante. Una de las mejores defensas de la liga encajó 45 puntos. Parcial de 45-27. Con 20 puntos de McCollum. ¡El escolta hizo un 9 de 9 en el tiro de campo! El cuarto perfecto.
Utah había cimentado su remontada en la tabla en la localía y la defensa. Anoche, sin defensa y jugando fuera... el equipo se hundió.
Portland ya sumaba 74 puntos al descanso. Y llevaba ventaja de 16. Una ventaja que se disparó hasta los 29 al final del tercer cuarto. La recta final del partido fue un mero trámite.
Los locales jugaron sin Jusuf Nurkic. No importó mucho. Porque Meyers Leonard lo hizo bien. Y porque el rival no apretó en pista. Leonard anotó 4 triples de 5 intentos.
Los Jazz estuvieron en manos de McCollum y Damian Lillard. El primero terminó con 30 puntos. Tras anotar 12 de sus 17 tiros de campo. El segundo se fue a 36 tantos, 11 asistencias y 8 rebotes. En un gran partido.
El equipo de Oregón metió el 53% de sus tiros de campo. Hizo un gran 16 de 32 desde el triple. Y anotó el 87% de sus libres. Un ataque de primer nivel.
Utah no funcionó. Su defensa fue un fraude. Donovan Mitchell acabó con 22 puntos. Fue el máximo anotador visitante. Y el español Ricky Rubio hizo 12 puntos y 7 asistencias. No estuvo fino en el tiro. Jugó 26 minutos.