LeBron James se ha lesionado en Navidad y en la cancha de su gran rival, los Warriors. Sucedió en el tercer cuarto, en una jugada sin contacto con rival alguno. James intentó hacerse con el balón en el suelo y sintió un chasquido en la zona de la ingle.
Restaban 7:51 para acabar el tercer cuarto y Lakers dominaba 57-71 a Golden State en el Oracle Arena. El jugador se echó mano a la ingle y tuvo que abandonar la pista para no regresar más a ella. Ese momento parecía el principio del fin para su equipo, pero los Lakers se recompusieron y dominando a Warriors sin LeBron ampliando incluso su renta hasta ganar por un tremendo 101-127.
James había hecho una primera parte primorosa: 17 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias para el 50-65 de su equipo. Se le había visto dominar la pista. Más tarde, cuando se marchó, estaba en 17 tantos, 13 rebotes y 5 pases de canasta en solo 21 minutos de acción.
Todo apunta a que se trata de una lesión muscular en los aductores, si bien los primeros exámenes médicos descartan que el percance sea grave. Aun así, habrá que esperar a que el jugador sea examinado con mayor detalle.
LeBron llevaba jugados 116 partidos consecutivos de fase regular y 156 consecutivos de temporada regular y playoffs hasta el día de hoy.